En la novela Drácula de Bram Stoker, que ha servido de inspiración para directores como F.W. Murnau, Tod Browning, Werner Herzog, Francis Ford Coppola y Chris McKay, el conde titular viaja desde su remoto castillo en las montañas de los Cárpatos a un nuevo hogar en Inglaterra en un barco llamado Demeter. Viaja con múltiples ataúdes llenos de tierra y está sellado en un ataúd propio. Semanas después de partir, el Demeter llega a la bahía de Whitby pero no hay nadie a bordo.
Al instante, los lectores conocieron la historia: Drácula, que necesitaba sangre humana para sobrevivir, se escabulló de su ataúd por la noche para liquidar a la tripulación del Demeter uno por uno. Se deja al lector imaginar su desgarradora experiencia. Sin embargo, en Drácula: Mar de sangre, de André Øvredal, ya no es necesario imaginar. La película, que ya puedes disfrutar en Cinemex Parque Delta, Cinemex Plaza Patria, Cinemex Macroplaza, Cinépolis Grand Plaza y muchos otros recintos en todo el país, está ambientada por completo en el barco.
La película, además de ser protagonizada por Corey Hawkins, Aisling Franciosi, David Dastmalchian y Liam Cunningham, cuenta con la participación de Javier Botet en el papel del mítico vampiro. El actor español cuenta con una amplia experiencia al momento de interpretar monstruos y criaturas fantásticas, ya que ha aparecido, aunque muchas veces cubierto de maquillaje, en algunas de las imágenes más terroríficas del siglo XXI.
Desde 'Drácula: Mar de sangre' hasta 'Slender Man': Javier Botet aprovecha su condición física en cada interpretación
Botet interpretó al personaje principal en Mamá de Andy Muschietti y al vagabundo leproso en las películas It del mismo director. Encarnó al enigmático y espeluznante Slender Man titular, así como al Hombre Torcido en El conjuro 2 y Key Face en La noche del demonio: La última llave. Botet también proporcionó la actuación de captura de movimiento para los monstruos en Alien: Covenant.
Botet se siente cómodo al momento de interpretar a estos monstruos y fantasmas en gran parte debido a su apariencia llamativa y atractiva. Mide 2 metros y vive con el Síndrome de Marfan, una condición genética que afecta las articulaciones y los tejidos conectivos del cuerpo humano, causando que se aflojen y se alarguen. Como le dijo recientemente a la BBC, el también actor de Malasaña 32 y La cumbre escarlata ha recurrido a su hiperelasticidad como una ventaja de rendimiento.
El síndrome también deja a uno asombrosamente flexible, y Botet, mientras está vestido con un maquillaje monstruoso, ha sido capaz de contorsionar su cuerpo de una manera que la mayoría de los contorsionistas comunes no pueden. "La enfermedad hace que las personas sean más delgadas, altas y muy flexibles. Así que toda mi vida fui muy flexible, toda mi vida hice trucos extraños y movimientos muy espeluznantes", declaró Botet, quien, además de su trabajo en películas españolas como [REC] y Ventajas de viajar en tren, ha colaborado en las series de Game of Thrones y The Strain.