Inicialmente, la actriz Kyra Sedgwick no estaba segura de aceptar su participación en la serie. Las grabaciones demandaban mucho tiempo fuera de casa y alejada de sus hijos. Sin embargo, viendo la gran oportunidad que tenía, su esposo el actor Kevin Bacon accedió a trabajar en menos proyectos para cuidar de los hijos de ambos y que Kyra pudiera involucrarse en la serie.
Tan sólo a dos semanas del estreno, la cadena TNT aprobó una segunda temporada, de 15 episodios.
Los primeros episodios de las temporadas uno, dos y tres, se transmitieron sin cortes comerciales.