Jason Momoa inició su carrera como actor después de mentir sobre ser un modelo profesional, ganando un papel en Baywatch.
En 2011, Momoa adquirió fama al interpretar a Khal Drogo en la serie Game of Thrones.
El 15 de noviembre de 2008, Momoa fue atacado por un desconocido en un bar en Hollywood, quien le cortó la cara con una jarra de vidrio rota.