Rigoberto Urán tuvo que atravesar por un sin fin de obstáculos y problemáticas para poder convertirse en uno de los mejores ciclistas del mundo. Originario de Colombia, Rigoberto nunca imaginó lo lejos que iba a llegar su amor por la bicicleta, pues lo cierto es que esta pasión le fue heredada por su padre. Él ha guardado la promesa de que las cuidaría, terminaría el bachillerato y se encargaría de perseguir su sueño por el ciclismo, así que como pudo se encargó de cumplir cada uno de sus sueños. Aunque hay varias personas que no quieren que éste llegue lejos, Rigo se encarga de hacer toda clase de malabares con tal de cumplir sus promesas y no dejarse rendir por estas adversidades, además su gran amor de la infancia, Michelle, se volverá un gran motor y aporte en su vida para que éste pueda llegar hasta el último rincón del mundo pedaleando y posicionándose en el podio.