Tony es un hombre de más de 50 años que ha perdido el rumbo de su vida, pues tras haber sido uno de los profesores más respetados de una de las escuelas de Liverpool, cuando éste pierde su trabajo se sume en una crisis que además de afectarle personalmente, también provocó que perdiera su matrimonio. Ahora él se dedica a ser taxista y todas las noches recorre las calles de Liverpool llevando a distintas personas a su destino, y mientras esto sucede escucha un programa de radio conducido por Lawrence. Aquel programa nocturno y la compañía ocasional de Rosa, una trabajadora de una cafetería a la que asiste Tony, son lo único que aún mantienen estable a este hombre, así que un día decide marcar a la estación ya que siente que él comparte varias cosas con Lawrence. Luego de esa primera llamada, Tony comienza a sentirse mejor, pues por primera vez en mucho tiempo se siente escuchado y además los puntos que comparte con Lawrence lo vuelven un ‘amigo del programa’ por lo que al fin se siente parte de algo importante. Tony cree que ha logrado una buena relación con Lawrence, así que ahora escucha con mayor atención su programa y se comienza a obsesionar cada vez más con el propio conductor y la visión que este comparte en cada sintonía, sólo que esto se vuelve algo peligroso ya que al final Tony interpreta la perspectiva de Lawrence de otra forma. La manía de Tony va en un aumento y todo empeora cuando descubre que el propio Lawrence no es la persona que tanto presume ser en su programa, por lo que su nueva ‘estabilidad’ se desmoronará devastadoramente.
