En el año 2003, en Madrid se comienza a sembrar el terror cuando aparece hasta ahora el asesino serial más peligroso de toda la historia del país. Aunque a simple vista pareciera ser un crímen más o un asesinato desolador, en realidad la escena del crimen posee varios elementos que la hacen destacar, pues a los pies de la víctima se encuentra una carta de copas que pertenece a la baraja española. A partir de ese momento la policía y los medios inician una gran investigación, pues el autor del homicidio no es como cualquier otro. Esta cacería se transformará en una historia de terror, debido a que el asesino comienza a matar con mayor frecuencia y a cualquier hora del día, además de que sigue dejando más cartas con diferentes números de copas a manera firma. La simbología y escenas del crimen contienen un mensaje que podría ser la clave para hallar al homicida o simplemente no tienen tal repercusión más que seguir burlando a las autoridades por su poca eficiencia al poder atraparlo. Esta no es una historia más de ficción, sino todo lo contrario
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