A punto de cumplir 53 años, Sue Perkins decide embarcarse en una nueva aventura del otro lado del mundo, pues no está dispuesta a estancarse en la monotonía que muchas personas le han comentado que sucede luego de llegar a los 50 años. Ella está dispuesta a realizar aquellas cosas que creía imposibles, pues varias de éstas en su lugar de origen se encuentran prohibidas o simplemente son ilegales, es por eso que viaja a Latinoamérica para poder empaparse de nuevas culturas, disfrutar de lo desconocido y arriesgado mientras vive al máximo la mediana edad a la que llegó. Sue se propone a disfrutar de cada día, no reprimirse y ser feliz con lo que hay a su alrededor, pues aunque de alguna manera se está haciendo más grande, no va a permitir que esto signifique que la vida se le está acabando; más bien acaba de iniciar una nueva etapa donde planea divertirse.