Kristen, David y Ben se han consolidado como un gran equipo de investigación. Los tres con sus habilidades, perspicacia y el hecho de no descartar nada de lo que ocurre a su alrededor han podido resolver cada caso que se les ha presentado aunque parezca imposible. En esta tercera entrega, este equipo no sólo hallará más demonios y entes sumamente temibles y poderosos, también sus propios vínculos los llevarán a reflexionar si es correcto dejarse llevar por los abruptos sentimientos que de pronto los engancha, pues Kristen y David poseen estilos de vida y perspectivas diferentes, así como misiones y familias que los aguardan, sólo que el enorme trabajo que desempeñan los ha llevado a compartir tanto que no saben si están confundidos respecto a su corazón. Además de los enredos sentimentales, el equipo también se ha visto afectado en cuanto a lo mental, pues sus casos van fuera de lo ordinario y muchas veces rebasan la comprensión humana, por lo que esto afecta a Ben. Sin duda a los tres les deparan más casos donde su fe, inteligencia, paciencia y audacia será puesta a prueba; además de que sólo trabajando en equipo pueden salir adelante.