Después de que sus padres, Javier y Gloria, son arrestados y deportados a México, los hermanos Acosta tendrán que unir fuerzas para aprender a sobrevivir ante la terrible realidad de la vida norteamericana. Emilio, el mayor de todos ellos, decide dejar atrás su desastrosa vida sin responsabilidades para asumir el papel del nuevo jefe de la familia. Mientras que, Lucia, quien siempre ha creído en la justicia del sistema, comienza a enfrentarse a la autoridad y se rebela de sus propios ideales. Por otro lado, Beto y Valentina tendrán que encontrar la manera de enfrentar todos los cambios de la edad sin ninguna guía sobre sus inquietudes. A pesar de todo, los cinco hermanos encuentran la forma de dejar de lado sus propios problemas para aferrarse al lugar que el esfuerzo de sus padres construyó para ellos.