Mickey Haller solía ser un grandioso abogado hasta que sufrió un accidente mientras surfeaba y a raíz de eso inició con un problema respecto a las adicciones que luego desembocaría en más problemas personales por lo que su mundo se vino abajo. Mickey atravesaba por uno de los peores momentos de su vida hasta que recibe la llamada de una jueza de Los Ángeles, quien le dice que su colega Jerry Vincent ha sido asesinado y en su testamento le heredó todos sus casos a Mickey, por lo que este hombre deberá enderezar su camino. Mickey tiene la oportunidad de volver a hacer lo que tanto amaba, pero sabe que no será fácil, pues además de que los casos que le fueron dejados llegan a complicarse, él aún tiene bastante trabajo personal pendiente con el que debe lidiar por lo que tendrá que aprender a balancear su vida. Desplazándose de un lado a otro en su antiguo carro Lincoln Town, el cual muchas veces usa su parte trasera como si fuera su oficina para tratar y discutir sus casos, Mickey hará lo necesario por descubrir la verdad, pues para él todos son inocentes hasta que se demuestre lo contrario.