Hacia 1999, cuando tenía solo 6 años, el checo Adam Ondra empezó a practicar el deporte de la escalada, en pequeños salones especializados para ello en formato infantil. Descubrir la actividad lo llevo a encontrar enfoque, disciplina y un objetivo, convertirse en el mejor escalador del mundo. Competidor profesional desde 2007, Adam es uno de los mejores escaladores de la historia, considerado por muchos un verdadero virtuoso, quien ha conquistado las rocas y paredes más complejas del mundo. Considerado como un hombre tímido e introvertido, así como un ícono, Adam ha transformado su deseo de escalar en una obligación por ganar, cueste lo que cueste. En el documental Adam Ondra: Pushing the Limit, los cineastas Jan Simanek y Petr Záruba acompañan al deportista, a lo largo de cuatro años en su vida, mientras se prepara para competir en los Juegos Olímpicos de Tokio, en 2020 y los esfuerzos que él y su pareja deben enfrentar para lograr esa meta.