Hacia 2004, la conocida buceadora libre finlandesa Johanna Nordblad estaba en la cima de su profesión. Había establecido un nuevo record, en la categoría femenina, nadando más de 150 metros, conteniendo la respiración por 6 minutos y 39 segundos. En el agua, había encontrado un nuevo propósito y sentido de toda su vida y sus esfuerzos empezaron a dirigirse a nuevos desafíos, particularmente luego de que, en 2010, Johanna sufrió un accidente de bicicleta que le destrozó la pierna. Por recomendación de un médico, comenzó tratamientos con agua fría en 2013 y se enamoro de ello, considerándolo una nueva fuente de experiencias y obstáculos a superar. En el cortometraje documental Apnea Bajo Hielo: La reina de las profundidades, el director Ian Derry (Felix) sigue a Nordblad en su intensa preparación para romper el récord de sumergirse en aguas heladas y los retos que le ha representado.