Ben Affleck estaba prácticamente ciego, ya que tenía que usar lentes de contacto de alta resistencia, que le bloqueaban la mayor parte de la visión.
En su gran escena de pelea, Jennifer Garner accidentalmente pateó a Ben Affleck con tanta fuerza en la cabeza que se desmayó brevemente.
Cuando Michael Clarke Duncan fue elegido, pesaba más de 130 kilos. Se le pidió que ganara 18 más para el papel, con el fin de adaptarse al físico de Kingpin. Para hacer esto, levantaba pesas durante treinta minutos al día y aumentaba el poder con una o dos repeticiones al día, además de comer lo que quisiera.
Como fanático del personaje, Ben Affleck se propuso leer todos los cómics que presentaban a Daredevil como preparación para su papel.
Esta es la primera vez que Colin Farrell usa su propio acento irlandés en una película estadounidense.