Trágica a la vez que visualmente maravillosa, Midway de Roland Emmerich, tiene todos los componentes que hacen mágica a una película de acción, un objetivo simple y con una carga interna que motivará a los personajes principales a dar todo por cumplir esta misión, el formulario personaje principal rebelde que ante toda lógica hará lo imposible, y lo más importante te hace sentir algo, es imposible que quedes indiferente ante esta película; todos los personajes son entrañables, el conflicto es presentado en los 11 minutos de openning más abruptos que he visto, te meten de tajo al planteamiento inicial y no paran hasta que la película llegue a su clímax, no se vuelve repetitiva o aburrida, cada secuencia de acción está dirigida de manera magistral, esto es acción elevada; hay que dejar de buscar el realismo histórico en cada película, esta cinta es más que centrarse en los eventos históricos que dieron pie al conflicto, es emocionante, visualmente espectacular y estarás siempre al filo del asiento; una película que en mayor o menor escala tiene la magia del cine.