La temporada de Halloween de este año trae el regreso de la franquicia de terror favorita de octubre creada en 1978 por John Carpenter. El asesino ficticio Michael Myers una vez más aterroriza a una ciudad plácida en la tercera parte de la trilogía H40, Halloween: La noche final, en donde Jamie Lee Curtis retoma su papel de Laurie Strode.
Myers se ha convertido en uno de los asesinos enmascarados más reconocibles en la historia del cine de terror, junto con villanos como Ghostface en Scream (que se inspiró en el asesino en serie de la vida real conocido como “el destripador de Gainesville” y Leatherface en La masacre de Texas (que supuestamente se basó en “el carnicero de Plainfield”).
La historia de la vida real detrás de Michael Myers (interpretado en la original por Tony Moran) es una especie de collage, un conjunto de terrores e influencias cortesía del director de la primera película.
Los detalles de la personalidad de Myers provienen de una visita que Carpenter realizó a una institución mental mientras tomaba una clase de psicología en la Universidad de Western Kentucky. “Visitamos a los pacientes con enfermedades mentales muy graves. Y había un chico, debía tener 12 o 13 años, y literalmente tenía este aspecto”, confesó el cineasta en Halloween: A Cut Above The Rest, un documental de 2003.
Cuando el productor de cine Irwin Yablans se acercó a Carpenter con la idea de crear una película de terror ambientada en la noche de Halloween “sobre niñeras acosadas por este asesino psicótico”, recordó al niño de la institución con “la mirada realmente malvada”, y lo describió en el guión como “un rostro pálido y sin emociones”.
Múltiples sitios de fanáticos de Halloween afirman que Myers también podría, en parte, estar basado en Stanley Stiers, quien ejecutó una matanza en Iowa en la década de 1920, e incluso asesinó a toda su familia justo la noche de Halloween de 1923. Sin embargo, los registros históricos sobre el acontecimiento son escasos por lo que quizá sólo se trata de una leyenda urbana.
Carpenter no menciona a Stiers en Halloween: A Cut Above The Rest, pero él recupera la interpretación de Yul Brynner como un “robot asesino que no podía ser asesinado” en la película de ciencia ficción de 1973, Westworld, como una inspiración adicional para elevar a Michael Myers de solo un personaje a “un estado mítico”. “Hacerlo humano, sí, pero casi como una fuerza que nunca se detendrá”.
Más allá de sus declaraciones en el documental, Carpenter no ha revelado más información sobre el chico que conoció en Kentucky hace tantos años, pero confiesa que eligió el nombre “Michael Myers” como un homenaje al distribuidor europeo de la película anterior de Carpenter, Asalto a la comisaría del distrito 13, estrenada en 1976.
Además, habla de la influencia que tomó de las tradiciones celtas cuando se trataba de la festividad de Halloween. Él y Hill estaban intrigados por el festival de Samhain y la idea de que las almas oscuras son liberadas en Halloween y causan estragos entre los vivos. Existía la creencia de que el mal no podía ser detenido o asesinado, y esto es lo que encarna Michael Myers.
“Michael Myers no ha evolucionado como personaje de ninguna manera o forma desde 1978,; él es la esencia del mal”, dijo David Gordon Green al L.A. Times en 2018. “Es alguien que avanza y reacciona al mundo que lo rodea, pero no con un objetivo consciente. Y cómo el mundo que lo rodea reacciona a su comportamiento es donde nuestra historia cobra vida”.