Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer no es apta para todo el público. Su narrativa ha perturbado a muchos, en especial su apertura donde vemos al asesino serial interpretado por Evan Peters llevar a Tracy Edwards (Shaun Brown) a su hedoroso departamento. Una vez dentro, lo amenaza con un machete, le pide relajarse para ver el Exorcista 3 y ponerse cómodo para realizar una sesión de Polaroids para satisfacer un fetiche.
Si ya vieron la serie recordarán que la policía encuentra fotografías de los cuerpos mutilados de todas sus víctimas, muchos de ellos acabaron en sandwiches que invitaba a sus vecinos para la cena, otros, los tambos en ácido clorhídrico fueron su perpetuidad. Hay muchísimas cosas muy desquiciadas en esta serie que alimentó el morbo de los fanáticos del terror y seguidores de los asesinos seriales, por eso ya esperan el especial Conversaciones con asesinos: Las cintas de Jeffrey Dahmer.
Desde que estrenó la serie, muchos han caído en la curiosidad de saber cada uno de los detalles replicados, dramatizados y ficcionados por parte de Ryan Murphy, por ejemplo, ¿qué onda con las fotografías instantáneas que guardaba en su gaveta? La mayor entrevista que el asesino dio para un canal en cadena nacional lo reveló. Obviamente la periodista no se iba a quedar con las ganas de alimentar el morbo de las personas, sobre todo luego de ser un caso replicado en cadena nacional.
Era mi forma de recordar su apariencia y belleza física. Quería guardar algo. Si no podía mantenerlos enteros, al menos podía tener sus esqueletos", dijo.
Además de las fotos, Dahmer quería montar un altar para recordarlos. Los adornos que tenía en mente: 10 cráneos, huesos, las propias imágenes. "Para que fuera un sitio donde pudiera ordenar mis pensamientos y alimentar mi obsesión", agregó. En esa misma conversación, Jeffrey explica que, además de los bares homosexuales, iba a baños públicos en busca de gente inocente que le gustara para victimarla. Se encontraron 74 fotos instantáneas; la mayoría de personas estaban destazadas.
De hecho, hay páginas dedicadas a examinar el caso que muestra las verdaderas instantáneas de los victimados. Imágenes realmente crudas donde se aprecia la cabeza, manos, pies y pene de una persona afroamericana completamente mutilada; otro, con extirpación de costillas y, la más bizarra, un torso completamente arqueado formando un puente de pies a cabeza. Hubo que fracturar el cuello y la caja torácica para formar esa figura anatómica.