Los amantes del terror seguramente tienen en su radar Mal de ojo, película dirigida por Isaac Ezban que busca darle un nuevo significado a la brujería y cómo ésta es capaz de coexistir en un mundo contemporáneo. Y como sabemos que tú apetito cinéfilo hizo que vieras esta película desde su estreno, es tiempo de hablar del final provocador de la cinta protagonizada por Ofelia Medina y Paola Miguel.
Luego de batallar contra el hecho que su abuela siempre fue una bruja y se obsesionó con absorber la vida de su hermanita, Nala (Miguel) decide hacerle caso al cuento que escuchó de Abigail (Paloma Alvamar) y decide apuñalar a su abuela que pareciera ebcibtraeae dormida en su habitación. Luego la baña con sal, elemento que hace polvo a las brujas.
Sin embargo, Nala no supo distinguir (cosa que parecía imposible) y en realidad asesinó a su madre luego que la abuela rejuveneciera y tomara la viva imagen de su madre, pues en realidad son idénticas al nacer trillizas.
Esto nos lleva al desenlace de la película y el punto clave de la historia. Una vez que la familia volvió a la Ciudad de México, quienes viven a unas cuadras de la popular avenida Paseo de la Reforma, Nala descubre a un espeluznante Baká escondido en una habitación y a un lado, un bulto que tomó forma de un traje de piel humana, ¡La abuela seguía viva y ahora vivía en su departamento!
La última escena muestra a la terrible bruja en su faceta más asquerosa con los músculos y tendones a simple vista, quién se abalanzó sobre Nala sólo para revelar que está bajo su dominio. ¿Notaste que la bruja venía del exterior? Esto confirma que ha sido la responsable de absorber la vitalidad de los niños del edificio, cerrando una especie de círculo narrativo.
Esto último también plantea que la bruja ahora está suelta en la Ciudad de México y ahora tiene millones de víctimas a su alcance. Y dado que Nala aún es una niña y no tiene la fuerza para alejarse por sí sola, estamos ante un desalentador final para nuestra joven protagonista. Sí, el mal triunfó en esta ocasión y no hubo nada ni nadie que pudiera interferir.
Esto último nos llevó a conversar con el propio Isaac Ezban, quién es conocido por dirigir películas como Los parecidos o México Bárbaro. Fue en nuestra entrevista donde terminó confesando que le emociona la idea de tener una secuela para Mal de ojo, pero lo que realmente lo motiva es que la historia tome otro rumbo.
"Si la película tiene éxito, me encantaría que pudiera haber una posible secuela, pero también me encantaría tener una precuela", confesó el director en entrevista con Sensacine México. "Imagínate la historia de las trillizas; es una historia que sólo nos da flashazos y podríamos verla terminada". Si aún no has visto Mal de ojo o simplemente quieres volver a hacerlo con un nuevo acompañante, aquí podrás comprar tus boletos.