El fin de semana pasado, House of the Dragon estrenó su sexto episodio. La segunda mitad de la serie, precuela de Game of Thrones, narrará el inicio de la Danza de los dragones, la guerra civil entre Targaryen que culmina con su casi extinción, e integra un nuevo elenco en el que se encuentran Emma D'Arcy, Olivia Cooke, John McMillian, Nanna Blondell y más actores.
Olivia Cooke (Ready Player One, Yo, él y Raquel) reemplaza a Emily Carey para el papel de la reina Alicent Hightower y Emma D'Arcy interpreta la versión adulta de Rhaenyra Targaryen, interpretada hasta ahora por Milly Alcock. Las jóvenes actrices tuvieron una emotiva despedida por parte del resto del elenco de la serie, incluidos Matt Smith y Paddy Considine.
Emma D'Arcy es una persona no binaria a la que le gusta interpretar mujeres y, asegura, es muy buene al hacerlo. En una entrevista con Independent, la estrella de House of the Dragon que debutó en el episodio 6 dijo que fue consciente de que era "una historia construida en torno a dos personajes femeninos, que buscaba interrogar la violencia inherente al patriarcado desde una perspectiva femenina. Además, me encanta hablar sobre el patriarcado, así que dije: '¡Genial, lo haré!'", comentó.
Le actore de Wanderlust y Truth Seekers agregó: "Fue emocionante ver a una mujer joven que tenía un conocimiento tan profundo de cómo funcionaban las estructuras de poder y veía que alguien, es decir, Daemon, podía existir a través de un conjunto de reglas completamente diferentes a las que se le otorgaban a ella. Ese deseo de buscar una especie de libertad masculina y ocupar espacio, en la forma en que ella percibe que lo hacen los hombres, realmente me llegó. Sentí eso cuando era niñe".
Tenía este tipo de conciencia tangible de cómo sería si fuera un niño. Entonces, creo que tuve la misma experiencia
¿Cómo fue para D'Arcy ser tratade como mujer en la serie y, además, ser señalade por interpretar a un personaje femenino? "Realmente me gusta interpretar a mujeres y soy muy buene en eso. Mi peor escenario es que, de repente, la gente me dice lo que puedo y no puedo interpretar. Tengo todas las herramientas necesarias para interpretar a mujeres. Viví como tal durante mucho tiempo. La gente todavía piensa que soy una. Es como: 'Déjame hacer mi trabajo. Soy realmente buene en eso'".
"¡Es complicado! En términos de queerness, la única buena razón para ser una persona no binaria, pública y profesionalmente, es que espero que les permita a las personas más jóvenes que se identifican saber que hay espacio en esta industria para ellas. Porque definitivamente hubo un punto en el que pensé: 'Oh no, esto no va a funcionar. Necesito tener el cabello largo y maquillaje para hacer este trabajo'. Y eso no es cierto".