Esta semana llegó a cines mexicanos La Huérfana: El origen, en donde descubrimos cómo fue que Leena Klammer (Isabelle Fuhrman) llega a Estados Unidos bajo el nombre de Esther Coleman para hacerse pasar por la hija perdida de una familia. En definitiva, todos moriamos por conocer el pasado de esta cruel asesina y saber qué la motivó a matar.
A diferencia de otras películas de asesinos seriales, La Huérfana fue todo un éxito en su momento, debido al plot twist en su trama, pues todos nos llevamos una sorpresa cuando descubrimos que la tierna Esther en realidad era una mujer de 33 años que padece una enfermedad conocida como hipopituitarismo. Pero ¿realmente existe está enfermedad?
En efecto, la historia no está tan lejos de la ficción, de hecho la película está inspirada en un caso real sobre una mujer de nombre Barbora Skrlová, quién padece está enfermedad y se hizó pasar por una niña. Si bien, no hay tantos casos, sí es algo que le podría pasar a cualquiera, pero ¿qué les sucede a las personas exactamente?
El hipopituitarismo ocurre cuando la hipofésis, la glándula que se encuentra en el hipotálamo, deja de producir cantidades normales de las hormonas, entre ellas la hormona del crecimiento. Por ello, hay quiénes dejan de crecer, aunque quienes la padecen no necesariamente fingen ser un menor para matar o engañar a alguien.
Este padecimiento no se puede prevenir y muchas veces es causado por un trastornos genéticos o enfermedades metabólicas. Sin embargo, Esther Culeman no solo padecía esta enfermedad sino que también tenía transtornos mentales que la hacían actuar violentamente y esos comportamientos fueron la que la llevaron a ser encerrada en un Instituto mental.
La película se encuentra actualmente en cartelera y si aún no has visto la primera entrega podrás encontrar la película en el catálogo de HBO Max.