Es muy posible que X no sea el regreso cien por ciento original del director Ti West a lo que define como horror experimental, pero sí es una de las películas más auténticas entre lo más reciente. Como Maligno, la última cinta sobrenatural de James Wan, aquí rinde homenaje a los clásicos del slasher como La masacre de Texas, Viernes 13, Cocodrilo, su propia Cabin Fever, bueno, de él la secuela y de Eli Roth, la primera; y a los thirllers como Psicósis y El resplandor.
Acompañamos a un grupo de jóvenes productores con ganas de hacer una película pornográfica en el campo, rentando una cabaña a un engreído anciano, Howard (Stephen Ure), quien vive un infierno al no poder satisfacer la aún calentura de su esposa, también vieja, Pearl. Para no arruinarles el resto, la señora intenta aprovechar la virilidad de sus huéspedes Wayne (Martin Henderson), Jackson (Kid Cudi), RJ (Owen Campbell), Maxine (Mia Goth), Lorraine (Jenna Ortega) y Bobby-Lyne (Brittany Snow), y al verse rechazada, comienza una masacre.
Por supuesto que hay muchas escenas sexuales. Es un híbrido entre una película porno y un slasher, donde el temor y el asco al deterioro del cuerpo es la principal arma perturbadora de West. Lejos del disfrute de tener ejecuciones, mutilaciones y asesinatos viscerales, saber que todos vamos para el mismo destino es lo que más incomoda como espectador. En ese sentido, el malnacido del realizador volvió decentemente. Y ya está en cartelera para que lo comprueben.
Eso sí, si esperan ver algo al nivel de A Serbian Film no lo encontrarán. El sexo es salvaje, no grotesco, a excepción de una escena que ya se darán cuenta. ¿Qué hay detrás de esta relación entre la vejez, la pornografía y el horror? "Llevan una relación simbiótica desde siempre", le explica el realizador a IndieWire, "Tal vez el horror esté un peldaño por encima de la pornografía, pero siempre son extraños. Incluso en los viejos videoclubs ambos géneros estaban apartados del resto; podías ver el horror, relegado, y a la siguiente puerta el porno", agregó.
Quería tomar el tropo del sexo y la violencia que es típicamente vulgar y tratar de hacer algo astuto con él.
Así que mezcló el terror psicológico dentro de su masacre. Todos los seres humanos le tenemos miedo al paso del tiempo, entonces la pareja antagónica se convierte en una de nuestras peores pesadillas. Ahí radica el valor y la autenticidad de esta nueva cinta. La perfecta combinación para que sea algo creepy y estilo de la productora A24, dadora de Lamb, Hereditary y La tragedia de Macbeth, por mencionar algunas recientes.