El cineasta tapatío dos veces ganador del Oscar, Guillermo del Toro, se encuentra en la 75 edición del Festival de Cannes compartiendo su particular visión respecto al futuro de la industria fílmica y sobre la naturaleza del artista ante un momento de constantes cambios con las plataformas digitales a la alza. Uno de los fenómenos en taquilla que vivió fue con el estreno de El callejón de las almas perdidas, película que perdió todo su público cuando llegó el fenómeno de Spider-Man: No Way Home.
El director de La forma del agua y La cumbre escarlata compartió un momento de reflexión acompañado de otros realizadores como Lynne Ramsay, Abel Ferrara, Abderrahmane Sissako y Rebecca Zlotowski, quienes debatieron sobre el quehacer cinematográfico, mismo que ahora está al alcance de más personas gracias a los avances tecnológicos, aunque esto jamás reemplazará la experticia de un cineasta.
"Una cosa es capturar una imagen y otra cosa es hacerlo bien. Cuando quieres manipular la luz, necesitas un buen equipo. Es una paradoja porque a veces la tecnología pareciera un aliado y a veces un obstáculo. Si quieres filmar una película, ahora lo puedes hacer con cualquier herramienta", mencionó Guillermo del Toro en Cannes 2022.
Esto llevó al realizador mexicano a expandir la percepción de un artista contemporáneo que, mediante el séptimo arte, expresa sus emociones y preocupaciones; aunque no desconoce el símbolo de un director como figura de industria, quien debe lidiar con aspectos comerciales, negocios, dinero.
El trabajo de un cineasta es hacer que el dinero funcione, el trabajo de un artista es rebelarse.
"No importa el modelo, tienes que encontrar tu estilo. Nos faltan voces en esta lucha entre plataformas, cada vez que pierdes una voz no por una razón sino por un dogma. El arte no es posible sin la desobediencia, sin los idiotas. Es una paradoja la constante lucha entre éxito total o total libertad, esa es la gran adversidad del arte".
La constante discusión que pareciera enemistar a las plataformas streaming con el cine tradicional, Rebecca Zlotowski se mostró positiva ante los gustos del público al momento de consumir contenido en Netflix sin importar el género o los valores de producción como Instinto peligroso o ¿Quién mató a Sara?
"Tenemos una gran oferta de plataformas, la gente dice que son planas, pero a mi me estimulan y me emocionan. Quieren triunfar en el algoritmo. Tenemos responsabilidad como directores, vemos a gente consumiendo Netflix, no tienen que salir", dijo Zlotowski en el encuentro con otros cineastas.
Por otra parte, Guillermo del Toro también abordó cómo los efectos de la pandemia y las edades del público también son un factor que los realizadores deben considerar al momento de hacer una película y, por supuesto, distribuirla. Así lo vivió con el estreno de El callejón de las almas perdidas y cómo sufrió el embate de Spider-Man: No Way Home.
"Me di cuenta con El callejón de las almas perdidas, estábamos arrastrando audiencias de 40 años o más grandes y lo estábamos haciendo muy bien. Y luego llegó una cosa llamada Omicron y todas estas personas ya no querían asistir a los cines, y fue cuando Spider Man arrasó con la audiencia joven y perdimos todo ese público", confesó Guillermo del Toro.
En la misma conversación el director tapatío compartió con sus colegas que la industria del cine debe considerar todos estos factores, el mundo sigue cambiando, las plataformas streaming están presentes y los fenómenos culturales en torno a los superhéroes de Marvel son un completo torbellino en la taquilla mundial, mismo que pocas películas son capaces de soportar.