Pocas veces hemos visto fracasar a una película de Marvel tanto como Morbius, si bien hay muchos títulos que no fueron del agrado de la crítica o el público, su taquilla internacional jamás decepcionó a Kevin Feige y lo mantuvo en los primeros lugar del boxoffice. Lamentablemente, Morbius, durante segunda semana de estreno, azotó contra el pavimento y la rapidez de Sonic 2: La película.
De acuerdo a información revelada por Paramount Pictures y publicada por Cinema Blend, la secuela de Sonic logró hacerse con el primer lugar de su taquilla doméstica (Estados Unidos), reuniendo 71 millones de dólares en su primer fin de semana de estreno. En comparación con Morbius, la cinta de Jared Leto y Daniel Espinosa únicamente hizo 39 mdd en su debut, pasando los 100 millones gracias a su desenvolvimiento en taquilla internacional.
La historia de la adaptación cinematográfica de Sonic ha estado llena de logros desde su inicio: fue una de las películas basadas en videojuegos mejor recibidas por el público antes de la crisis de la pandemia con 58 millones de dólares en su debut. A pesar de que la duda acechaba al estudio debido a los cambios en los hábitos de consumo del espectador, Sonic 2: La película rompió el récord de su antecesora por 13 millones.
Además de quitarle la corona a Jared Leto y su complicado (para otros aburrido) superhéroe, desbancó a la película de acción de Michael Bay, Ambulancia, protagonizada por Eiza González y Jake Gyllenhaal. Sonic 2: La película es, sin duda, una de las adaptaciones favoritas de los gamers y parece que le hechizo de Jim Carrey como Eggman sigue surtiendo efecto; desafortunadamente otras adaptaciones de videojuegos como Uncharted: Fuera del mapa no corrieron con la misma suerte con el fandom.
En conclusión, Morbius cayó un 83% en su taquilla, de acuerdo a datos de ComicBook.com. Y aunque ya todo el mundo la considera un flop en las filas de Sony-Marvel, incluso su director, el estimado que alcanzará en taquilla será de 129 millones de dólares, cantidad que, de cumplirse, al menos remunerará a la producción. "La única razón de que no la estemos nombrando como un desastre, es que costó lo que la primera película de X-Men y no la última", explica un artículo en Forbes.