Ruth (Nell Hudson) fue la primera víctima de Leatherface (Mark Burnham) en La masacre de Texas, ya disponible en Netflix. Utilizó un pedazo de cristal para rebanarle el estómago. Siguió con Dante (Jacob Latimore) abrirle el rostro con un hacha de cocina; se dio un festín en el autobús con todos los emprendedores, atravesó con su motosierra el estómago de Sally Hardesty (Olewe Fouéré) y terminó con la cabeza de Melody (Sarah Yarkin) en sus manos.
La única sobreviviente, Lila (Elsie Fisher), se salvó de milagro. El pilóto automático de su automóvil se la llevó y Leatherface no podía correr por la herida de escopeta. La fortuna le ha sonreído, al menos esta película, porque todo parece indicar que David Blue Garcia y el productor Fede Alvarez dejaron la puerta abierta para la venganza de Lila, es decir, para una posible secuela dentro del canon de la cinta original de Tobe Hooper.
En la escena postcréditos, Leatherface regresa a la casa donde todo comenzó, el mismísimo infierno donde asesinó, desolló y desmembró a víctimas y cadáveres exhumados. Para que la continuación suceda, La masacre de Texas necesita tener buenos números en la plataforma, recepción favorable y resultar redituable para Legendary Pictures y su comprador. Todo depende de su primer fin de semana de estreno, donde generalmente se registran la mayor cantidad de streams.
"Lo que hicimos básicamente fue introducir nuevos personajes para mantener el legado vivo a las siguientes generaciones", mencionó el director a varios medios de comunicación, "Y tengo muchas ideas, muchas de ellas que no pude usar para esta película, otras para las cuales llegué tarde. Sé que los escritores y Fede tienen mucho más por contar, me gustaría entrar ya a producción y empezar a trabajar en la siguiente porque sé que sería genial", agregó al diario mexicano Excélsior.
De aprobarse la segunda película, su producción tardaría mucho más en realizarse pues deben juntar otro grupo de actores que representen a las nuevas víctimas, darse el tiempo para escribir un guion sólido que cuenta cómo se prepara Lila para su venganza, qué sucede con Leatherface al volver la casa de los crímenes registrados en 1973 y, lo más importante, por qué el nuevo elenco se cruzaría con el titán de la motosierra.
Estaríamos viendo la película hasta finales de 2023 o 2024, el tiempo mínimo y habitual entre una y otra película de este género. Hazlo posible, tío Netflix.