Tobey Maguire podrá ser nuestro Peter Parker favorito pero no esto no tiene porqué eximirlo de las historias sobre el pésimo comportamiento mostrado durante su participación en Las reglas de la vida, junto a Charlize Theron; y en la trilogía de El Hombre Araña, de Sam Raimi, producciones que lo hicieron brillar a costa de tolerar varios de sus arranques. Te contamos algunas historias que, quizá, desconozcas de tu trepamuros consentido.
Hasta ahora, Spider-Man: Sin camino a casa ha sido todo un éxito taquillero y no hay ningún reporte de alguno de sus clásicos arranques o, posiblemente, ya maduró y dejó de comportarse como un divo. Habrá que esperar a culminar el ciclo comercial de la cinta para conocer las historias detrás de escena y tener un panorama más claro de cómo se portó con Andrew Garfield, Tom Holland, Zendaya, Jacob Batalon y el cineasta Jon Watts.
Theron ha comentado que su relación con Maguire, rodando bajo el mando de Lasse Hallström, fue bastante tortuosos. Simplemente no se llevaban bien. "Todos los días fueron distintos por razones igual de variadas: el clima, la desaparición de los libretos o simplemente no te llevas bien con tu compañero", recordó a V Magazine. Afortunadamente, durante la misma charla, la también estrella de la saga Rápidos y Furiosos aceptó que limaron cualquier aspereza.
A Raimi se la aplicó con su claustrofobia. Le ocultó su padecimiento y el cineasta se las tuvo que ingeniar para que su estrella no usara todo el tiempo la máscara de látex y spandex. Luego, para El Hombre Araña 3, tras la rehabilitación de su lesión en la espalda, Maguire pensó que era buena idea pedir mucho más dinero por lo riesgoso de su trabajo. Buscaba más de los 15 millones que tenía asegurados y le hizo la vida imposible a la producción entera de Marvel, según fuentes que trabajaron en la cinta.
Eso no es todo, con todo y el lujo que se dio de no avisar a la producción sobre su miedo a estar en un espacio encerrado, Maguire se sintió tremendamente ofendido por el ofrecimiento de realizar el casting para ver si a los productores (presumimos que se refirió a Laura Ziskin y Ian Bryce) le convencían sus aptitudes y virtudes actorales para ser el perfecto aracnido de su trilogía. A Raimi ya lo había convencido.
Así que hicimos una pequeña audición, en cinta, al interior de un pequeño cuarto. Y les tomó dos semanas verlo. Mi ego quedó un poco raspado.
Le confesó el actor a Howard Stern, durante una entrevista que le realizó. Ahí no quedó la cosa, para sus pulgas, le pidieron más pruebas. "Quisieron verme realizar una escena de acción. La hicimos, pero como el traje no permitía que vieran mi preparación física, hice la prueba de cámara sin ropa para que vieran mi condición física", agregó. Ya se sentía el rey del mundo y todavía ni cobraba. Maguire habrá hecho historia a través de un personaje, aunque su persona dejaba (¿o sigue dejando?) mucho qué desear.