Will Smith no siempre fue el exitoso y famoso actor como lo es en estos días. No siempre tuvo dos nominaciones al Oscar (por Ali y En busca de la felicidad), tenía una cuenta bancaria con muchos ceros o era querido por millones de personas alrededor del mundo. En realidad, hubo un momento donde tocó fondo mientras se hacía de cierta fama como rapero a sus 21 años y fue gracias al músico y productor, Quincy Jones, quien le cambió por completo su vida y le ofreció la oportunidad de improvisar una audición para El príncipe del rap. Esta es la historia.
Era diciembre de 1989 y Will no tenía un solo dolar en su cuenta bancaria, a pesar de ser un joven rapero con mediana popularidad, ¿la razón?, no sabía que debía pagar impuestos de sus ganancias musicales y las consecuencias fueron graves, una vez que le decomisaron todos sus bienes de valor.
Fue así como en una movida desesperada siguió el consejo de su novia, quien le sugirió que asistiera al programa de televisión Arsenio Hall Show, de este modo se colocaría otra vez bajo los reflectores. Esto le permitió conocer a Benny Medina, un conocido representante y productor de televisión, quien le compartió la idea de hacer un programa llamado El príncipe del rap, pero Will no quiso, aseguraba que él era cool, pero no actor.
Por suerte, Medina logró convencerlo de asistir a una fiesta que daría Quincy Jones en su casa. Este momento fue realmente intimidante para el joven rapero (de apenas 21 años) sin experiencia actoral, recuerda Will en su libro de memorias. "Todos estaban allí, desde Steven Spielberg hasta Tevin Campbell; Stevie Wonder y Lionel Richie estaban llegando cuando me detuve. Eso fue demasiado para mí; sabía que no pertenecía allí".
Y justo antes de que mi frágil autoimagen me convenciera de regresar, vi a Benny Medina, un rostro familiar, un salvavidas mientras me ahogaba en otro mar de insignificancia e irrelevancia.
En aquellos años, Will Smith era mejor conocido por su pseudónimo The Fresh Prince, razón por la que Jones lo reconoció de inmediato en cuanto los presentaron. "Quincy cruza la habitación con los brazos abiertos y nos agarra a Benny y a mí en un solo abrazo: 'Bienvenido hombre, bienvenido'", recuerda el protagonista de Rey Richard: Una familia ganadora.
'Cobra Kai': ¿Por qué Will Smith tiene crédito en la serie de Netflix?En ese momento, Quincy le preguntó de dónde era Will, por lo que respondió orgullosamente "Filadelfia"; eso bastó para que el productor siete veces nominado al Oscar dijera en voz alta a un tal Brandon: "¡Brandon! ¡De Filadelfia a Bel-Air ahora!". Bueno, resulta que se dirigía a Brandon Tartikoff, el entonces director de la cadena NBC, él tomaba las decisiones sobre qué programas se producían y cuáles no, además estaba acompañado de Warren Littlefield, segundo al mando y quien tomaría años más tarde ese mismo cargo.
Después de estrechar su mano, el dueño de la casa volvió a vociferar, esta vez una orden que desconcertó a Smith: "Está bien, ¿puedo tener la atención de todos? Vamos a tener una audición. ¡Limpien los muebles de la sala!". En ese preciso momento, Will reflexionó en su cabeza: "¡Oh, guau! ¡Una audición en una fiesta, eso es genial! ¡Quincy es el hombre! Me pregunto quién hará la audición", vaya sorpresa cuando Jones dijo casi de inmediato: "Consíganle a Will una copia del guión de Morris Day, en el que estábamos trabajando".
Al principio, lentamente, y luego dolorosamente, recuerdo que mi nombre era Will. Mi padre me lo había dado. Y como él no estaba aquí y nadie más se movía.
El terror se apoderó de Will de un segundo a otro y no era para menos, incluso recuerda que tomó del brazo a Jones y le dijo: "Quincy, no, espera, no, no puedo hacer esto ahora". Viendo el estado de su joven invitado, lo llevó a una sala para charlar en privado. "Háblame, Filadelfia, ¿qué necesitas?", mencionó el productor mientras el protagonista de Bad Boys para siempre decía que no estaba preparado para una adición.
'Rey Richard: Una familia ganadora': Will Smith interpreta al padre de la tenista Serena Williams en emotivo tráilerSon solo un par de escenas. Tengo algunas personas que leerán contigo. Solo tienes que ser tú y divertirte, respondió Quincy Jones.
Poco después Will Smith le pidió tiempo, comenzó por una semana para memorizar el guión y prepararse lo mejor posible, pero fue aquí cuando la sabiduría de Jones se sobrepuso. "Está bien, ¿sabes qué va a pasar en una semana? Brandon Tartikoff va a tener una emergencia en uno de sus programas y tendrá que volar a Kansas para despedir a alguien. Entonces tendrá que reprogramarlo para la semana siguiente".
Esto sonaba perfecto, hasta que el compositor de "Summer in the City" y "The Secret Garden" continuó con su enseñanza. "Bien, dos semanas. Entonces Warren Littlefield va a tener algo en la escuela de sus hijos que olvidó que estaba en su agenda. Y él va a tener que volver a programar durante dos semanas después de eso".
Pero ahora mismo, todos los que necesitan decir que sí a este programa están sentados en esa sala esperándote. Y estás a punto de tomar una decisión que afectará el resto de su vida.
Miró a los ojos al productor del álbum Thriller del legendario Michael Jackson y fue cuando lo entendió todo, no había un mañana, su vida pendía de un hilo y estaba en la casa de Quincy Jones frente a los directivos más importantes de la televisión en Estados Unidos. "A la mierda. Dame diez minutos". Fue así como Will Smith improvisó una audición, convenció a todos los asistentes y se hizo del protagónico de El príncipe del rap, una serie que duró seis años al aire y se convirtió en el trampolín más grande de su carrera, el resto es historia.