Jamie Lee Curtis es un año mayor que Psicosis, el clásico de Alfred Hitchcock protagonizado por su madre, Janet Leigh, y estrenado en 1960. La actriz, que ha dejado una huella imborrable en el género de terror desde que se estrenó Halloween en 1978, reflexiona sobre el trabajo de Leigh y cómo su legado aún se mantiene décadas después.
“Sesenta y dos años es mucho tiempo”, reflexiona Curtis en entrevista para ET, antes de agregar que ni siquiera recuerda la primera vez que se sentó a ver el thriller del también director de Vértigo y Los pájaros. “Creo que cuando era joven inventé alguna historia sobre verla en alguna parte. Pero probablemente no la vi hasta que ya era adulta y realmente la aprecié”.
Hay mucho que apreciar en el slasher de Hitchcock, que sigue a la secretaria Marion Crane (Leigh), que está huyendo después de robar $ 40,000 y se registra en el remoto Bates Motel, al borde de la carretera, dirigido por un hombre tan siniestro como enigmático (Anthony Perkins) dominado por su anciana madre.
“Es simplemente una película asombrosa, es simplemente un clásico”, dice Curtis. “No solo la ejecución de la película en la forma de arte, sino también la forma en que [Hitchcock] la estrenó. Había límites muy específicos establecidos sobre cómo debería verse”.
“Una vez que estabas en el cine, no podías irte, prohibieron que la gente se fuera porque no querían revelar el secreto de la película”, continúa Curtis. “En el mundo de hoy, con las redes sociales, es muy difícil guardar secretos en las películas y en el momento en que se ve una película, miles de personas tuitean al respecto de inmediato”.
En los últimos años de su carrera, Leigh hizo apariciones en La niebla y Halloween H20: Veinte años después de John Carpenter, ambas protagonizadas por Curtis, antes de morir en 2004 a la edad de 77 años. La actuación de Leigh ha tenido un impacto duradero en Hollywood y la escena de la ducha ha sido replicada o referenciada por historias de terror modernas en las décadas posteriores.
Lo que hizo que el momento de Psicosis fuera tan brillante es que Hitchcock hizo que una ducha inocente y cotidiana se convirtiera en maldad pura. La escena se ha recreado muchas veces: Anne Heche protagonizó el remake toma por toma de Gus Van Sant en 1998, la cantante Rihanna interpretó el papel de Marion Crane en la serie Bates Motel. Incluso la propia Curtis recreó el momento de su madre en la serie de terror de Ryan Murphy, Scream Queens, en 2015.