Cuando James Wan dijo lo mucho que echaba de menos estar en películas de terror, con presupuesto moderado y alejado de los gigantescos sets del DCUE no estaba mintiendo, su nueva película, Maligno, está inspirada en clásicos del género que volvió a ver por placer y tener una idea clara sobre cómo rendir homenaje a todas esas producciones que lo hicieron enamorarse del miedo y, al mismo tiempo, crecer como un tipo bastante temeroso.
Incluso su protagonista, Annabelle Wallis, tuvo que entrarle a una selecta lista que su realizador le entregó para poder desarrollar el personaje de Madison Mitchell, una mujer con la horrible maldición y capacidad de tener visiones sobre asesinatos que ocurren en tiempo real, descubriendo mucho tiempo después que detrás de todas esas violentas imágenes hay un ente tenebroso. El guión está completamente inspirado en una novela gráfica que el propio Wan escribió en 2011: Malignant Man.
Antes de comenzar el rodaje, James envió a la actriz Los Ojos de Laura Mars de Irvin Kershner, Shattered de Wolfgang Petersen, Deep Red de Dario Argento y Blow Out de Brian de Palma. "Además de que fue el regreso a mis raíces con algo de terror de los años 80 y principios de los 90, con maestros como Wes Craven y David Cronenberg, y así explorar nuevos temas e historias mientras experimentaba con una estética diferente, porque quién sabe cuándo pueda volver a hacer algo así", explicó el cineasta a Warner Bros.
Los comentarios negativos hacia el filme vienen por la incomprensión de detectar el género. ¿Es un slasher?, ¿un thriller?, ¿terror psicológico?, ¿serie b?, ¿gore? Pero para todo hay una explicación si es que son de la comunidad que piensa en Maligno como un híbrido sin pies ni cabeza: "Se trata de un genre-bender, un mezclador de géneros que me encantan, desde lo psicológico hasta el giallo italiano, así como matices de ciencia ficción", señaló Wan.
Warner Bros Pictures
También inmiscuye el género policiaco, pues define esta entrega como su propia versión de las clásicas cintas de resolver misterios a través de los ojos de un asesino y tener visiones de gente muerta (al estilo Sexto Sentido) o de sucesos espantosos por ocurrir, como Stephen King lo plantea en su nuevo libro 'Después', recién editado en México por Plaza Janés, ubicando a Jamie Conklin con su habilidad sobrenatural de ver todo lo que nadie más puede y el mundo ignora, entre muchas otras.
Dicho esto, Wan sabe lo que hizo y las críticas de los estéticos del celuloide seguro le tendrán sin cuidado, hizo una película para su gusto y para toda la gente que entiende el horror como una vía de escape para fantasías reprimidas y traumas insuperables a través de situaciones que pueden ser escalofriantes y absurdas. En este caso, Madison utiliza su don para llegar a dar con el ente o asesino que aparece constantemente en sus sueños.
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"Este estilo de novela policiaca, el giallo, fue popularizada en Italia por Mario Bava, Argento y otros, que tomaron un estilo muy trillado y lo reinventaron con propia sensibilidad cinematográfica. Y creo que todo esto que explicó no sólo se puede ver en Maligno, también en El Juego del Miedo", dijo. Hablando del maestro Dario Argento, también creador de la obra de arte Suspiria, los guantes del asesino en Maligno son un diseño completamente inspirado en los usados por el antagonista de Deep Red.