La película dirigida por Tatiana Huezo, Noche de fuego, se llevó la mención especial de la selección Una Cierta Mirada en el Festival de Cine de Cannes, una historia sobre tres niñas que crecen en la sierra de Guerrero bajo un ambiente violento a causa del narcotráfico y la explotación de minas, tras esta experiencia el productor Nicolás Celis habló sobre las reacciones del público europeo y recordó una anécdota bastante cruda que vivieron él y Alfonso Cuarón al elegir a Yalitza Aparicio como protagonista de Roma.
"Les contamos (en Europa) que cuando elegimos a Yalitza sus papás y toda la comunidad pensaron que se trataba de algo relacionado con la trata de personas, y la gente se reía de esas preguntas y respuestas, como si fuera algo bastante de tomar a la ligera y divertido cuando es una realidad bastante dura. A veces en el extranjero la percepción es bastante distinta", contó en conferencia de prensa ofrecida tras su noche triunfal en Francia.
Tatiana, ovacionada durante 10 minutos al término de su proyección, compartió que fueron directamente a celebrar la ocasión a una pizzería y al interior estaba un grupo de personas que habían estado en la sala, entonces, se pusieron de pie y los recibieron con muchos más aplausos. Así cerró la experiencia francesa, pues el recorrido a lo largo de más festivales en México y el mundo apenas comienza, Celis calcula que tendrá un estreno comercial antes de fin de año.
Sobre la trama, basada en la novela de la escritora estadunidense Jennifer Clement, Ladydi, fue muy clara al explicar que, aunque se ubique en medio de un contexto bastante violento, su película pretende ir mucho más allá. "Creo que dejamos de ser conscientes de la dimensión del daño que ha hecho la violencia, cómo ha permeado nuestra vida, familia, lenguaje y todo", opinó.
Y sí, es triste pensar que la sociedad mexicana ha normalizado este ambiente, y pese a que es una realidad bastante lejana para el primer mundo, la realizadora cree que la crítica en Cannes quedó muy conmovida debido a que visualizaron los colaterales de este fenómeno social desde la perspectiva de la mirada infantil, un factor que influyó bastante para sensibilizar a los europeos y explicarles la verdad a miles de kilómetros de distancia.
"Las niñas cuestionan al mundo, a sus madres, y todo lo que está pasando. Adquieren un pensamiento crítico en la escuela rural donde estudian y, de esta forma, retrato a mujeres reales, complejas, llenas de claroscuros; se vuelven hasta cierto punto contestatarias y rebeldes ante lo que las rodea, de esta forma me alejé de los clichés con los que se retrata a la mujer en nuestro cine", compartió.
Noche de fuego no fue filmada en la sierra de Guerrero debido a que es un punto rojo en el mapa de la República Mexicana por el cultivo de amapola, los grupos del crimen organizado y la explotación de minas de oro, por lo que es difícil el acceso y bastante peligroso para trasladar a toda una producción, por eso se eligió la sierra gorda de Querétaro, donde Mayra Batalla y el elenco tuvieron más seguridad.