Mi cuenta
    'Petrov's Flu': La liberadora gripe de un cineasta condenado por el gobierno de Vladimir Putin

    El director Kirill Serebrennikov vivió el estreno de su nueva película Petrov’s Flu desde Rusia, pues está cumpliendo con una condena de tres años de libertad condicional a causa de una malversación de fondos federales. Conoce su polémica historia.

    Indirectamente, el Festival de Cine de Cannes combina su reputación y la elegancia con la controversia, y este año no es la excepción: el director ruso Kirill Serebrennikov no está presente en Francia para promover su nueva película Petrov’s flu por tener estrictamente prohibido abandonar el país, luego de ser acusado y señalado como uno de los culpables de malversar millones de rublos a través del proyecto Seventh Studio, parte de la Escuela de Teatro Artístico de Moscú, una institución estatal que dirigió.

    Todo un caso, ¿no? Desde el 23 de mayo de 2017 le fue retirado su pasaporte durante la redada al Centro Gogol, parte de la organización educativa, y a su departamento, perdiendo la oportunidad de participar o rodar películas fuera de Rusia. De acuerdo con el portal soviético Life, la contadora del Centro Gogol confesó el lavado de hasta 200 millones; sin embargo, las investigaciones del comité de investigación federal del país sólo le pudieron atribuir la cantidad de 133 (casi 1.8mdd), argumentando excesivos costos en organización de eventos y contractos ficticios.

    El acto tuvo la intervención del presidente Vladimir Putin y el resto de su gabinete asignado a la defensa del orden y patrimonio ruso, encontrando culpable a Serebrennikov y condenándolo a tres años de libertad condicional y el pago de una multa de 129 millones de rublos (1.7 mdd). El 6 de julio del año pasado,  medios locales dieron a conocer que el cineasta y su abogado no apelaron la sentencia, pese a las protestas y los movimientos intelectuales que consignaron el veredicto como la neutralización de la oposición. Cate Blanchett fue una de las artistas que lo apoyaron en su lucha por liberarlo de tal acusación. 

    El artista cree que buscaron castigarlo por no callar ante casos mal vistos a nivel federal, como la promoción de la adopción de huérfanos rusos a manos de estadunidenses, de los derechos de la comunidad LGBTQ, de la liberación de presos políticos, el libre albedrío del arte y de un sistema democrático más justo, que les permita definir a sus gobernantes más libremente; también ha atacado y acusado a la televisión rusa de ser una vil propaganda federal en todo su contenido.

    AP/DW

    En un acto por no mostrarse amedrentado, Serebrennikov filmó en su propio confinamiento la coproducción francosuiza y rusa Petrov’s flu, la adaptación de la novela Los Petrov en la Gripe y su alrededor, una historia que narra el andar de la familia Petrov durante un padecimiento severo de gripe y su incapacidad de diferenciar si están viviendo una alucinación o la realidad de una vida cotidiana completamente anormal para ellos. El largometraje se estrenó hoy en Cannes y, como es una costumbre en el ruso, también director del filme Leto, un verano de amor y rock dejó a la audiencia dividida, enamorada y confundida, a juzgar por los comentarios en redes sociales.

    Una reacción digna de un cineasta experimental, polémico y contestatario, y de una cinta compitiendo por la Palma de Oro, filmada en la complejidad de una vida arraigada al estricto cumplimiento de una condena federal. "Trabajé en la película bajo un contraste: por la mañana y tarde iba a la corte y por las noches trabajé en esta historia en parques y avenidas, fue un proceso sin poder dormir mucho, pero me ayudó a liberarme y olvidarme un poco de esta situación kafkiana", dijo a Variety.

    Al vivir en total y parcial confinamiento desde hace cuatro años, el ruso se dio tiempo de aprender alemán, leyó libros de tamaño bloque y escribió nuevas óperas, porque es uno de los directores y guionistas de obras de teatro más destacados de su nación, sin olvidar su trabajo en cine, donde ha dirigido casi 15 producciones y de las más destacadas en su país. Tan popular es que, pese a que su gobierno lo tenga tremendamente castigado, se ve en la necesidad de estrenar sus obras por la convocatoria a nivel popular, de esta forma Petrov’s Flu estaría llegando a cines soviéticos el 9 de septiembre próximo, con o sin la Palma de Oro.

     

    facebook Tweet
    Te puede interesar
    Back to Top