Ya es un hecho el éxito que ha rodeado a Cruella, el más reciente live-action de Disney que funge como una historia de origen para la villana, no por nada una semana después de su estreno aprobaron la secuela. Sin embargo, hay un problema con el que se topa la película al momento de conectarse con 101 dálmatas, la cinta original de la que se desprende todo, por lo que analizaremos esto y las implicaciones futuras que podría tener.
LA PIEL DE LOS DÁLMATAS Y CRUELLA
Como sabemos, Cruella originalmente tenía un gusto obsesivo por la piel de los dálmatas, uno de los ingredientes que detonan la trama de 101 dálmatas. No obstante, en la cinta protagonizada por Emma Stone esto prácticamente pasa desapercibido. Desde pequeña la antiheroína tiene los colores blanco y negro como una de sus características debido a su cabello, pero, contrario a lo que se podría pensar, no odia a los perros e incluso convive prácticamente durante buena parte de la película con uno de ellos en particular: Buddy, sin dejar a un lado que los caninos son parte de sus planes para cometer crímenes menores.
A pesar de darse cuenta de que la Baronesa (Emma Thompson) tenía entrenados a sus dálmatas y fueron los responsables de la muerte de su madre, Cruella no mostró un genuino rencor por estos animales y hasta convivió con ellos para obtener de vuelta el collar que tanto anhelaba. Incluso, tras la aprehensión de su madre biológica y después de literalmente enterrar su personalidad de Estella, Cruella decide llevarse a los dálmatas a su nueva mansión (Hell Hall) y hasta regalar a los perritos que tuvo la hembra, uno de ellos Perdita que se fue con Anita Darling (Kirby Howell-Baptiste), y Pongo que se quedó bajo el cuidado de Roger (Kayvan Novak).
'Cruella': Tipper Seifert-Cleveland la niña Cruella que también estuvo en 'Game of Thrones'Es verdad que el detalle de los cachorros de Anita y Roger conecta las acciones con 101 dálmatas, pero no parece normal que Cruella haya regalado a los perritos, cuando originalmente lo único en lo que piensa es en su piel. Esto representa el problema principal para conectar completamente ambas películas, ya que las historias no embonan en su totalidad, lo que lleva a pensar que Disney quiere contar la historia desde una nueva perspectiva y quizá su objetivo no sea volver canon todo el material de 101 dálmatas, sino generar una reinvención con Emma Stone a la cabeza.
Además, el maltrato animal es un tema muy delicado a nivel social, por lo que hacer notar este detalle tan cruel sería un punto en contra de la película. Con esto en mente y el decálogo de valores que siempre quiere mostrar Disney en sus películas, es probable que Cruella y 101 dálmatas no se conecten y la nueva cinta sirva para reiniciar el universo detrás del personaje; si nuestras sospechas son ciertas, veremos un montón de cambios más y deberán darle una nueva motivación a la protagonista para seguir siendo el centro de la historia.