¿Te pareció conocido el estilo de Un viaje pesado con sus bromas y cámaras ocultas? Esto se debe a Jeff Tremaine, también productor de cintas como Jackass 3D y El abuelo sinvergüenza. Esta nueva apuesta dirigida por Kitao Sakurai (El samurái ciego) es protagonizada por Eric André, Lil Rel Howery y Tiffany Haddish, quienes debían engañar a personas que pasaban por la calle y hacerlas creer que las excéntricas situaciones de sus personajes en realidad sucedían, pero entre tanto material hubo una escena en especial que no pudo llegar al corte final y aquí te contamos de qué se trataba.
Los primeros días de rodaje la cinta no tenía ni pies ni cabeza, ni siquiera una historia que seguir, ya que Eric André y el resto de guionistas sólo tenían en mente una cantidad desbordante de bromas, pero sabían que en algún punto debían darle estructura a la película, esto mismo les llevó a rodar una serie de situaciones divertidas en principio, pero que no aportaban en absoluto al roadtrip que vimos al final, así surgió la escena del exorcismo, una de las favoritas del propio André, pero que tuvo que descartar, así lo contó en entrevista con The Film Stage.
Creo que la broma del exorcismo fue probablemente la mejor broma por sí sola. Simplemente no encajaba en el cuerpo de la película. Tuvimos esta broma donde nos quedamos la noche en un motel que estaba embrujado.
"Empecé a enfermarme y fui poseído por un espíritu demoníaco", dijo André: "Rel consiguió que un predicador real viniera y me hiciera un exorcismo. Tenemos todos estos efectos prácticos ocultos. Estoy levitando en la cama, las paredes empiezan a sangrar, las luces parpadean. Las cucarachas salen de un cuadro". La broma comenzó a tornarse más oscura, ya que el inocente predicador en verdad creía que estaba ante una legítima posesión y hacía todo lo posible por continuar con el debido ritual. Inclusive dio instrucciones prácticas a Lil Rel Howery para ayudar a su amigo, por supuesto todo fue captado por las cámaras ocultas.
"Y este predicador real está tratando de hacer que Rel saque los demonios de mí. Rel sigue maldiciendo y dice: 'en el nombre de Jesucristo, ¡sal de mi amigo!' El predicador estaba como: 'Está bien, eso es bueno, pero no maldigas' El tipo estaba realmente en el anzuelo". Debemos admitir que las bromas con gran planeación siempre son capaces de hacernos reír, especialmente las que tienen que ver con situaciones paranormales, por lo que una posesión, efectos con sangre e insectos, además de un predicador, sin duda suena a material imperdible. Aunque lamentablemente, por bueno que pareciera, era una situación que inclusive para Un viaje pesado no encajaba con la sencilla historia.
Por esta razón la escena tuvo que ser cortada, al menos ahora sabemos de su existencia y podemos imaginarla, especialmente después de ver algunas escenas ridículas con toda clase de golpes, vómitos y por supuesto: momentos sexuales con un gorila. No cabe duda que esta cinta puso a prueba nuestro sentido del humor y quizá algunas escenas perduren en nuestros recuerdos, nunca se sabe.