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Si algo caracteriza a Ana (Ludwika Paleta) en Madre sólo hay dos es su obsesión por tener el control de todo. La serie de Netflix presentó a este personaje como alguien sumamente comprometido y regido por reglas y eso la ha llevado a su éxito personal, aunque de repente un juego de boliche la hace olvidar todo esto que la ha acompañado en buena parte de su vida y descuida su trabajo por una pequeñez, algo que realmente no tiene sentido.
'Madre sólo hay dos': ¿Habrá temporada 2 de la serie de Netflix?Sí, Ana es competitiva, aunque no tanto como para descuidar el trabajo que tanto tiempo consume en su vida y que hasta su familia le ha reclamado al respecto. La reunión que iba a tener cuando decidió competir en boliche con Pablo (Javier Ponce) y sus amigos era con su equipo de trabajo. La pudieron haber esperado, es verdad, pero descuidar de tal forma su celular para no ver las llamadas y mensajes de Cynthia (Elena del Río), así como perder la noción del tiempo nos hace tener dudas.
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En los tiempos en que vivimos (y más los godínez) el celular es prácticamente una extensión del cuerpo y no está a más de un metro de las personas todo el tiempo, especialmente en horas de trabajo, así que con un cargo como el de Ana debió atender al teléfono o quizá no distraerse tanto tiempo para jugar boliche, ya que tenía una junta con su equipo y su temperamento no le hubiera permitido tomar la decisión de hacer esperar a sus colaboradores sin si quiera avisarles.
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