Si algo ha caracterizado al seriado de Netflix: The Crown es hacer de su ficción una biografía disfrazada; es decir, cada temporada ha sido escrita con destreza y conocimiento de los hechos ocurridos en la familia real y, aunque evidentemente hay libertades creativas, pareciera que todo lo visto no dista mucho de la realidad. La producción no sólo desmenuza las relaciones de la Reina Isabel II con su marido, su madre, hermana e hijos, sino que el contexto sociopolítico que existía sirve de contexto para desarrollar ciertas tramas.
The Crown también ha dedicado episodios completos a hechos muy particulares, como el caso del episodio cinco de la temporada 4 titulado: Fagan, en referencia a un hombre que marcaría un antes y un después en el Palacio de Buckingham: Michael Fagan, un intruso que llegó hasta la recamara de la Reina con la intención de hablar con ella o al menos sólo fue eso lo que sucedió. En julio de 1982, los impuestos creados por la Primer Ministro Margaret Thatcher (Gillian Anderson en la ficción) tuvieron una serie de consecuencias desafortunadas; la tasa de desempleo volaba por los aires y los manifestantes aumentaban día con día.
Michael Fagan (interpretado por el actor británico Tom Brooke) entró al Palacio de Buckingham dos veces: la primera en junio de 1982 y después el 9 de julio del mismo año, burlando la seguridad de toda la comitiva que servía a la Reina e incluso hasta robando comida y una botella de vino. El verdadero Fagan admitió que tuvo un colapso mental después de haber sido abandonado por su esposa, desempleado y completamente desorientado. En una entrevista a The Telegraph, confesó que apenas si habló con la monarca, a pesar de que en su momento el abogado de este dijo que duraron 10 minutos conversando.
'The Crown': ¿Qué opina la Reina Isabel II y la familia real sobre la serie de Netflix?
Lo anterior fue tomado para la ficción en The Crown y en el mencionado episodio Fagan se sienta en la cama de la Reina, tiene tiempo para ir al baño, limpiarse una herida en la mano por haber roto un vidrio del palacio y discutir sobre Margaret Thatcher y su gestión, así como de los desempleos en el país. Michael afirma que todo lo narrado tiene demasiadas licencias creativas y que no fue así como sucedió; de hecho, recalca que cuando entró al cuarto y recorrió una cortina, la Reina se despertó y salió de la recamara.
El verdadero Michael Fagan se pronunció molesto por el casting de Tom Brooke para el personaje inspirado en su persona, ya que lo catalogó como carente de encanto. Finalmente, dijo que Peter Morgan (creador de la serie) nunca se le acercó para poder contarle de primera mano los hechos. Dicho episodio es uno de los más importantes de la temporada e incluso contribuye mucho al viaje del personaje de la Reina Isabell II (Olivia Colman) en la entrega, haciéndola más compasiva. También funciona como un catalizador para su enfrentamiento con Thatcher en episodios posteriores.