Cielo de medianoche es la nueva película en la que Demián Bichir participa. Se trata de una cinta original de Netflix y que tiene como director a George Clooney (Suburbicon). Una historia postapocalíptica que sigue a un científico solitario en el Ártico que busca con desesperación comunicarse con un grupo de astronautas para que no regresen a la Tierra debido a una catástrofe mundial. En el marco del Festival Internacional de Cine de Los Cabos tuvo lugar una conversación entre el actor mexicano y el periodista Arturo Aguilar, resaltando varios puntos tanto del largometraje como de la carrera del intérprete.
“La primera vez como actor hice Fantoche [1977] y aparecí por accidente, porque quien escribía era amigo de mi padre y nosotros estábamos en una obra de teatro”, confesó Demián Bichir sobre su primer papel frente a una cámara: “Fuimos al rodaje y había una frase en la que se representaba la batalla del 5 de mayo en el Desierto de los Leones y formaron a los niños en una fila y cada uno decía la línea: ‘maestro yo no quiero ser de los invasores’”, obviamente cuando fue el turno de Bichir lo escogieron para el rol, pero con un peculiar detalle: “Me doblaron la voz y era la de una mujer. Cuando me vi y no era mi voz, dije ‘esto no puede ser el cine’”.
Para Demián, Rojo amanecer y Sexo, pudor y lágrimas fueron las películas más importantes durante su etapa prácticamente noventera como actor: “Tomé Rojo amanecer porque soy hermano de Bruno y se necesitaba un hermano. La hicimos en completa clandestinidad en un foro al sur de la ciudad”, confesó el también protagonista de La monja y Los ocho más odiados: “Yo le llamo el parteaguas. En un contexto más oscuro pudo penetrar a la industria estadounidense, le pudo hacer un pequeño orificio y se hizo una película importante”:
“A partir de Rojo amanecer sentí que era un afecto que quería desarrollar y después tuve la fortuna de hacer Miroslava, La vida conyugal y luego cuando hago mi primera película como protagonista: Hasta morir, me costó mucho trabajo”, asegura Bichir, quien lleva 25 años “picando piedra” en Estados Unidos y justo cuando estaba haciendo castings se enteró de la ópera prima de Fernando Sariñana y le pidió chance para audicionar; al final se quedó con el papel y el resultado definió su rumbo, ya que a partir de ahí pudo salirse de cualquier etiqueta y tomar decisiones más conscientes sobre los papeles que elegía.
En Cielo de medianoche Demián Bichir interpreta a Sánchez, uno de los astronautas: “Sánchez se autoexilia en la nave porque está solo y porque considera que puede servir y ayudar para iniciar una nueva vida en otro planeta”, confiesa el actor: “El gran desarrollo de la mente del humano ha significa nuestra propia felicidad y realización y al mismo tiempo somos nuestro propio deterioro y desgracia. Todos tenemos esa posibilidad de elegir como quieres tu vida: hermosa o caótica”.
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