Alguien tiene que morir de Netflix representa el debut de Manolo Caro estando detrás de una serie española, además de que ahora cambió el dramedy por un drama de época en la que se mostró puntual en tocar temas como la homofobia, racismo y falsas esperanzas que se detona tras el regreso de Gabino (Alejandro Speitzer) a España tras ser llamado por su familia de vuelta, aunque su acompañante: Lázaro (Issac Hernández) cambia totalmente el reencuentro y todo se torna inusualmente extraño y hasta mortal, cosa que analizamos en nuestro final explicado que obviamente tiene muchos spoilers.
LOS FALCÓN SE ACABARON
Luego de una atípica Competición juvenil de tiro al pichón, la atención no se centró en el ganador o los competidores (es más, ni supimos quien salió airoso), el problemón que se había generado entre la familia Falcón llegó a su clímax con muchas aristas. Primero, Gregorio (Ernesto Alterio) se enteró que su madre: Amparo (Carmen Maura) fue quien mató a su padre, todo porque ella estaba oprimida en su matrimonio y no iba a criar como quería a su hijo, por lo que en un momento de hartazgo decidió darle un balazo a su esposo.
Aunque la encaró por uno segundos e incluso le hizo un poco de daño físico, Amparo no tuvo elementos para defenderse, aunque su momento más álgido aún no llegaba. Socialmente humillado porque Mina (Cecilia Suárez) y Lázaro tuvieron relaciones sexuales en el bosque cercano al club, Gregorio decide que los va a fusilar, aunque el meollo del asunto es que Alonso (Carlos Cuevas) le dispara por la espalda cuando amenazó a Gabino. Acto seguido, Amparo mata a Alonso y también a Lázaro, aunque se topó con un valiente Gabino que se atrevió a jalar el gatillo y terminó con la vida de su abuela.
'Alguien tiene que morir': ¿Quiénes eran "Los Rojos" y por qué se escondían? (Netflix)
Con este resultado, los únicos sobrevivientes de los Falcón son Gabino y Mina, quienes realmente ya no estaban cómodos con su estancia en España. Lo más probable es que con el dolor generado por la muerte de Lázaro y tras el escándalo social, regresen a México o al menos salgan de la ciudad en la que vivían, ya que no serían queridos con todo lo que ocurrió. La pregunta ahora es qué pasaría con la fortuna familiar, al final estaban acomodados y vivían con ciertos lujos, pero ahora los trámites legales serían un obstáculo. Aun así, prácticamente los Falcón como eran conocidos han caído y quedaron muy mal parados.
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