Ahora mismo los reflectores se encuentran sobre el Festival Internacional de Cine de Venecia, uno de los encuentros fílmicos más importantes de la historia y donde comienzan su camino las películas de corte artístico más importantes del año; por ello Tengo miedo torero, dirigida por Rodrigo Sepúlveda y protagonizada por Alfredo Castro y Leonardo Ortizgris se ha presentado en el marco del certamen y por esta razón entrevistamos al intérprete connacional ganador del Ariel, quien estuvo a poco de viajar al viejo continente, pero por temas de salud no pudo hacerlo.
La historia se desarrolla en medio de la turbulencia política de la dictadura de Pinochet en el Chile de los años 80, una vieja y pobre travesti se involucra en una arriesgada operación clandestina tras enamorarse de un guerrillero que le pide ocultar en su casa peligrosos secretos de la resistencia.
Una película que gira en torno a la persecución y hartazgo social durante una de las épocas más oscuras en la historia chilena, sin embargo, estos temas fueron sumamente familiares para el mexicano Leonardo Ortizgris, quien logró encontrar ciertas similitudes en su origen que le ayudó a entender de mejor forma su personaje revolucionario:
No es muy lejano lo que se vive en Chile y lo que se vive en México, creo que América Latina se distingue por sus dictaduras.
“Más allá que sean militares o por abuso de poder, en México un mismo partido gobernó por mucho tiempo, la misma cúpula y esto es un poco lo mismo. Lo tenía muy fresco y estaba muy claro de lo que estábamos hablando, me veía reflejado con la sociedad y la historia chilena, lo que sí fue importante para mí como actor fue entender el contexto histórico para este misterioso revolucionario que no se sabe lo que está sintiendo con 'La loca del frente', eso fue el mayor goce de estar jugando con Alfredo Castro.”
'Tengo miedo Torero': La película LGBTQ+ que agotó entradas para verse digitalmente - Venecia 2020Esta misma relación profesional con Alfredo Castro, quien toma el papel principal en la cinta, no comenzó en tierras chilenas; este par se conoció en México poco antes de comenzar el rodaje de Museo, la cinta de Alonso Ruizpalacios coprotagonizada por Gael García Bernal y el propio Ortizgris; de ese momento la generosa personalidad del intérprete chileno llevó a una estrecha relación profesional, esto mismo se reavivó cuando comenzaron a trabajar para Tengo miedo torero: “nos reuníamos por las mañanas o a veces después de filmar y nos íbamos a cenar, platicábamos de lo que venía y cómo trabajar la siguiente escena.”
Alfredo Castro confiaba mucho en mí y yo desde el principio le dije: 'estoy aquí para servir a esta historia' y hubo mucha libertad y comunicación.
Es importante mencionar que la cinta llevaba mucho tiempo bajo rumores e incremento por mucho tiempo la expectativa en Chile debido a adaptar la novela de Pedro Lemebel, aclamado escritor considerado un auténtico baluarte de la cultura chilena. Sin embargo, el guion toma caminos propios, lo que significó un mayor reto actoral.
“Lo que debía tener claro era saber habitar el tiempo y el espacio donde estábamos contando la historia porque el guion de la película -no así la historia de la novela- tiene estos dos elementos: Pinochet y el tema revolucionario, por otra parte la historia de amor de estos dos hombres y cómo es que se conocen.”
El guion se sale un poco de esta cuestión política de Pinochet.
La cinta no sólo apostó por revivir uno de los hechos históricos más recordados de Chile y América Latina mediante la adaptación de la novela de Lemebel, también se decidió mantener un estilo único desde la producción, la cual se caracterizó por ser pequeña sin la necesidad de mover enormes grupos de trabajadores, siempre se contó con lo justo y esto por sí solo fue toda una experiencia para Ortizgris.
'Amores modernos': El temor que tenía Leonardo Ortizgris para convertirse en Alex“Me encantó vivir la experiencia del presupuesto y recursos de la película, no se necesitó hacer un gran despliegue de inversión para generar esta producción; es una película muy íntima, pero también se enfrenta con muchos extras para hacer las manifestaciones, pero la gente en Chile supo trabajar muy bien esto.”
Esto mismo pudo reflejarse en el trabajo del director de fotografía, Sergio Armstrong, quien tuvo múltiples conversaciones con el intérprete mexicano mientras filmaban la historia: “Armstrong trabajó con mucha luz natural y con unos lentes que en los costados hacían como una especie de aberración, me explicaba, estuvo experimentando mucho y creo que la fotografía y los ambientes que genera son impecables.”
Un tema con tantas raíces sociales que han logrado tener eco por toda Latinoamérica sin duda tendrá un efecto especial en el público mexicano desde la perspectiva histórica con la cual podremos identificarnos a causa del desprecio político a través de los años, pero también por el trabajo artístico de Leonardo Ortizgris, quien mencionó la necesidad por seguir abordando temas sociales como la persecución a la homosexualidad, elemento vital de la cinta.
Quien tenía el valor de levantarse, abrir la ventana a los cuatro vientos y decir: 'esta es mi decisión, mi necesidad, este es mi impulso y así veo el amor', era un valiente y un verdadero revolucionario.
Y concluyó: “La película habla de la marginación y prejuicio; creo que hablar de estos temas nunca va a ser suficiente, pero también habla del amor y de dos personas solitarias, una que lucha por algunos ideales y otra que está cansada de los ideales. También es una historia muy conmovedora por la naturaleza de estos personajes y los universos que ellos habitan.”
Ahora mismo Tengo miedo torero está viviendo un gran momento con impacto gracias a su proyección en el prestigioso Festival de Cine de Venecia, sumado a ello la respuesta positiva de la crítica internacional ha logrado que la cinta (que tuvo estreno previo vía streaming) haya alcanzado enormes ventas y de este modo ha causado un verdadero furor en su país natal, lo que podría derivar en un pronto viaje al resto de Latinoamérica y con ello podríamos pensar en como uno de los primeros en recibirla.