Han pasado algunos días desde la emotiva conclusión que nos dio la temporada 3 del éxito germano original de Netflix: Dark, la cual dejó claro que el amor es capaz de traspasar los misterios que encierra el universo a través de la enredada comprensión del espacio-tiempo. Pero uno de los elementos que fueron conservados desde la primera entrega de episodios fueron los nombres y referencias bíblicas, dando mayor complejidad a la historia de Baran bo Odar y Jantje Friese, los cuales analizaremos para decir de qué forma se conectan los protagonistas de la serie con los personajes pertenecientes a las icónicas escrituras de la Biblia.
A lo largo de la serie queda claro que sus creadores mantuvieron una estrecha relación con el cristianismo, basta con nombrar a los propios Adán (Dietrich Hollinderbäumer) y Eva (Barbara Nüsse), quienes encabezan la lucha de bandos a través del tiempo y realidades alternas. Del mismo modo son los creadores el enredo cíclico, clara referencia al primer hombre y mujer en la existencia y cómo la serpiente corrompió el pensar de Eva para tomar el fruto prohibido (muy parecido a la máquina esférica que vimos en la tercera temporada) y con ello ser desterrados del paraíso. De este modo abordaremos los caminos paralelos de múltiples personajes que conforman Dark.
JONÁS Y LA GRAN BALLENA - ‘DARK’ EN LA BIBLIA
Por supuesto comenzaremos por el personaje que por más tiempo cargó sobre sus hombros la historia: Jonas (Louis Hofmann), hijo de Hannah (Maja Schöne) y uno de los principales errores en la matrix después de la creación de dos mundos paralelos. Este personaje tiene un gran similitud con Jonás, quien forma parte de la Biblia y es considerado uno de los profetas de Jehová, pero que sin duda tuvo una aterradora historia marítima digna de reflexión y aprecio.
‘Dark’ de Netflix: El video que prueba que la temporada 1 y 3 son igualitasDe acuerdo con el Antiguo Testamento, Jonás debía llevar la palabra de Jehová a distintos sitios bajo el reinado de Jeroboán II, sin embargo, en un momento decidió alejarse de su tarea y optó por subir a una embarcación en Joppe que lo llevaría lejos de su misión. Esta travesía se vio interrumpida por feroces vientos que pusieron a la deriva a la embarcación y toda su tripulación. Jonás se dio cuenta de su error y se ofreció como ofrenda hacia el mar... hacia Jehová; una vez lanzado a la profundidades marinas una enorme ballena lo tragó, dentro de su estómago oró por tres días y tres noches.
Si volvemos al papel que desarrolla Jonas en Dark, podemos notar ciertas similitudes: a pesar de conocer su misión que contemplaba seguir viajando por el tiempo hasta convertirse en Adán, Jonas se rehusaba, pero cíclicamente siempre era castigado con su transformación. Esto terminó gracias a Claudia Tiedemann (Lisa Kreuzer) y su comprensión del tercer mundo, sino hubiera sido por ella Jonas debería ser tragado, una y otra vez por su destino repetitivo, una ballena.
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