TEORÍA DE LOS SUEÑOS - 'DARK' TEMPORADA 3

Una vez que Jonas (Louis Hofmann) y Martha (Lisa Vicari) cumplen su última misión en Dark, surge un inmenso sentir de desolación debido a que han evitado la creación de sus mundos, por ende desaparecerán así sin más y dejarán de existir, por ello Martha con lágrimas en los ojos hace las siguientes preguntas: "¿Crees que quedará algo de nosotros? ¿O es todo lo que somos? Un sueño. Y nunca existimos realmente.”

Al ser un verdadero misterio, Jonas se limita a responder “no lo sé”, cosa que es realmente entendible, el destino es tan impredecible que ni siquiera los viajeros en el tiempo saber lo que les espera. En ese momento sus cuerpo comienzan a convertirse en pequeñas particular de energía y de este modo sus cuerpos dejan de existir en un mundo en el que nunca pertenecieron.

Este último planteamiento que da la serie ligado al déjà vu de Hannah (Maja Schöne) y la frase de Katharina (Jördis Triebel), abre la posibilidad de tener esperanza que los actos de Jonas y Martha no fueron para nada e inclusive se ganaron un lugar en el mundo original.

Los personajes pertenecientes a la realidad correcta podrían tener pensamientos y sueños que ellos consideren habituales, pero en realidad son reflejo de acontecimientos creados en realidades paralelas, quizá Martha tiene razón, sólo fueron un sueño para Hannah, Peter (Stephan Kampwirth), Katharina, Regina (Deborah Kaufmann) y los hermanos Wöller: Torben (Leopold Hornung) y Benni (Anton Rubtsov).

MUERTES ESPANTOSAS

Uno de los detalles más curiosos que surgen durante la cena también tiene un fuerte vínculo con el destino trágico de sus versiones alternas. Las muertes más impactantes y desafortunadas en Dark son protagonizadas por todos los que están sentados alrededor de la mesa, sólo basta recordar cómo el cáncer y las quimioterapias le fue quitando poco a poco la vida a Regina, no sin antes morir a manos de Tronte (Walter Kreye) en un escenario postapocalíptico.

Por otra parte Hannah viaja -una vez más- en el tiempo, esta vez acompañada de su hija Silja (Aurora Dervisi) y llegan a 1911 en busca de Adam (Dietrich Hollinderbäumer), sin embargo, con un cruel acto, su propio hijo la asesina al asfixiarla, el siguiente paso es enviar a su media hermana al futuro donde ayudará al joven Jonas.

Una de las peores muertes es la de Katharina, quien buscaba ayudar a Ulrich y sacarlo del hospital psiquiátrico, por supuesto debía robar las llaves del recinto a su madre, Helene Albers (Katharina Spiering), pero el cruel destino se encargó de enfrenar a muerte a este par de personajes. Al final y sin saberlo, Helene mata a sangre fría con una roca a su propia hija.

Finalmente Peter, quien después del Apocalipsis en el mundo uno se encarga de buscar a Charlotte (Karoline Eichhorn) y Franziska (Gina Stiebitz) en compañía de su hija menor, Elisabeth (Carlotta von Falkenhayn). Pero encontró una terrible muerte con un cuchillo en la garganta al intentar salvar la vida de su pequeña de manos de un hombre desconocido. Aquella versión de Peter nunca supo si Elisabeth pudo liberarse, un final trágico.