Hablar de Zach Braff (Garden State) es referirse inmediatamente a risas y nostalgia. El actor estadounidense de 45 años no sólo es tendencia últimamente por tener una relación muy estable con una de las mejores actrices de esta generación: Florence Pugh, sino por su historial en la industria del entretenimiento, principalmente como actor en la serie: Scrubs, con su ya mítico papel del Dr. John “J.D.” Dorian, sin embargo, también tiene una pequeña y remarcable carrera como cineasta.
En 2004 dirigió la cinta de culto acerca de la insatisfacción crónica de toda una generación: Garden State, en la que participó Natalie Portman. Su debut fue tan logrado que el filme es recordado como uno de los mejores retratos juveniles de principios de este siglo. Una década después regresó con otra comedia titulada Wish I Was Here con Kate Hudson, pero el efecto no fue el mismo.
Muchos pensamos que no volvería a dirigir tan pronto después de este descalabro, pero en 2017 regresó con Un golpe con estilo, película cuyo guion corrió a cargo de Theodore Melfi (Talentos ocultos) y que habla de tres hombres de edad avanzada que, al perder su pensión porque la empresa en la que trabajan vende todo y desaparece, dicen tomar justicia por propia mano y asaltar el banco que les retiene su dinero para poder mantenerse.
Estrenos Netflix del 22 al 28 de mayo: 'Control Z', 'Ya no estoy aquí' y másAhora el retrato sobre la incertidumbre del futuro se ve desde otra óptica y contexto, pero nuevamente vemos personajes buscando una seguridad perdida o en todo caso, robada. Indudablemente la idea de trabajar con Alan Arkin, Morgan Freeman y Michael Caine como protagonistas fue algo que Braff no iba dejar pasar y, por supuesto, dota al relato con su característica melancolía e ironía:
“Es muy interesante ver como las escenas cobran vida, porque todos son actores maravillosos que han sabido encontrar unas características únicas en sus personajes” mencionó Zach en una entrevista: “A veces son pequeños y sutiles detalles. Durante el rodaje, veíamos la escena en los monitores y cuando ves lo que has rodado en una grande pantalla descubres algo muy sutil en el trabajo de ellos y eso me encanta,” puntualizó el también actor que ha participado en BoJack Horseman y The Disaster Artist.
'Élite': Netflix confirma la cuarta temporada y a sus seis protagonistasPara Braff, dirigir a estos monstruos de la actuación en una comedia resultó una de sus experiencias más gozosas, mientras que para los actores fue pan comido. En el caso de Michael Caine y Morgan Freeman (a quienes vimos en Batman inicia y Batman: El caballero de la noche) esta fue su sexta película que filman juntos y, mientras que Alan Arkin encajó muy bien. Braff los llevó por la improvisación y el rodaje resultó igual o más divertido que la película: “A veces dejaba la cámara rodando sin decir acción y ellos seguían interpretando la escena, seguían en sus personajes. Esto es genial cuando se trata de comedia y son maravillosos y divertidos” señala el director.
Un golpe con estilo es otro tramo arriba en la carrera como cineasta para Braff, pero no lo ve más que como un instrumento de aprendizaje y diversión: “Me encanta dirigir porque es un trabajo en equipo. Me encantan todos los aspectos artísticos que implican rodar una película. Si te gustan estos tres actores, verlos juntos es algo muy especial en una película de robos de amigos. Amo a los tres y es un viaje divertido.” Sin duda Zach lo pasó bomba de la mano de los histriones y ellos también crearon una sinergia única también junto a intérpretes como: Ann-Margret, Joey King, Matt Dillon y Christopher Lloyd.
Un golpe con estilo está disponible en Netflix y es una de las mejores opciones para ver en este momento de confinamiento: un filme de esos que te dejan con una sonrisa.