Durante el reciente foro "Uniendo a LATAM" organizado por Comscore y presidido por Luis B. Vargas, vicepresidente de Comscore Latinoamérica, con la participación de Juan Carlos Lazo Guerra, Dir. Desarrollo en Alebrije Producciones (causantes del éxito Amores perros); Gustavo Romboli, Dir. Comercial Imagem Filmes (distribuidores de Deseo de matar, el actual éxito de Netflix); Carlos Hansen, CEO de BF Distribution (que llevaron Estación Zombie a Chile) y Amín Karam, representante para Latinoamérica de Showtime Analytics, se plantearon varios temas relacionados al regreso de millones de cinéfilos en el país. La conversación dejó una pregunta esencial en el aire, ¿de verdad estaremos preparados para los cambios que están por llegar en la reapertura de cines?
A través de una encuesta realizada a 11,627 personas en México, Estados Unidos, Reino Unido e Irlanda, Karam dio un interesante panorama relacionado a la tan ansiada apertura de salas: el 90% respondió que considera importante que estén sanitizadas adecuadamente; el 80% argumentó que el uso de guantes y cubrebocas por parte del staff de cada cine es crucial para percibir mayor seguridad. Muy bien por parte de los exhibidores, pero ahora pensemos: ¿el público está dispuesto a corresponder a estos esfuerzos?
Uriel Linares
¿ESTAMOS LISTOS PARA ACATAR LAS MEDIDAS DE LA "NUEVA NORMALIDAD"?
Es un hecho, los cambios no serán sencillos. Y puede haber usuarios sumamente renuentes a ellos. Teniendo en cuenta que la manera de ver películas en pantalla grande previo al coronavirus no volverá, tenemos que preguntarnos: ¿Todo el público estará dispuesto a acatar las medidas que los expertos soliciten? La misma encuesta de Showtime Analytics menciona que el uso de guantes y cubrebocas para los asistentes no era una idea agradable, pues sólo el 65% estaba de acuerdo con estas medidas. Entonces cuando se trata del personal es un sí, pero para los clientes es un no... Ok.
Las cosas se complican conforme más las pensamos, ¿quién será el valiente que le impida la entrada a una persona con boleto en mano, pero que los filtros sanitarios lo indiquen como riesgoso? ¿Habrán nuevas políticas de reembolso para estos casos?
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Sigamos analizando: Supongamos que vamos al cine acompañados de nuestra familia, amigos o en pareja. Sabemos que la contingencia sanitaria que tanto nos atañe es de alto contagio, pero, ¿de verdad todos estarán dispuestos a dejar una butaca entre su acompañante? ¿Quién vigilará a aquellos que no lo respeten y provoquen incomodidad en el resto de la sala? ¿La bonita práctica de ver una película con todo y apapachos tendrá que ser olvidada? Esperemos que no... como bien decía Luis Vargas en otro webinar: "Habrá salas de cine mientras haya novios".
Uriel Linares
¿TENDREMOS QUE PAGAR MÁS POR UN BOLETO LIBRE DE VIRUS?
El método de compra de entradas será otro reto. De acuerdo con los encuestados, apenas el 53.6% piensa que los boletos electrónicos serán viables. En México, el 60% de las taquillas mexicanas se llenan con dinero en efectivo, ¿vamos a querer dar billetes, recibir cambio y un boleto impreso? Además debemos considerar que las aplicaciones de las cadenas cobran un pequeño porcentaje adicional al costo promedio de cada entrada que, en una familia, la comisión de varios boletos podría representar la compra de uno más en la taquilla.
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Finalmente las dulcerías, en las que hemos pasado toda una vida en esa espera y que ahora será impensable por la sana distancia. Aquí también pensaríamos que probar los métodos de pago inalámbricos sería la opción... ¡pues no! Según los datos de dicha empresa el 43.2% no ve confiable ese método. Por otro lado, si los cines aceptaran sólo transacciones a través de una app, perderían miles de compras por impulso (el antojo, pues) en el punto de venta.
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Ahora, ¿te imaginas pedir un megacombo con palomitas, nachos, hotdog, helado, refrescos e intentar comerlo con guantes y cubrebocas mientras ves Tenet? ¿Y luego tratar de saborearlo sin miedo en un espacio cerrado cerca de los demás? Habrá que hacer un manual para mantener los buenos modales, los tapabocas limpios y las camisas sin manchas. Si salir por un rato con tapabocas es extenuante, ahora imagina ver una película de más de dos horas sin podértelo quitar por miedo.
Estas y muchas dudas más nos vinieron a la mente al escuchar a los profesionales de la industria. Será una tarea titánica encontrar la fórmula idónea para el regreso a los cines. Sin embargo, valdrá la pena analizarnos como consumidores y el grado de compromiso que tendremos para seguir haciendo del cine una experiencia divertida, sana, familiar y, sobre todo, libre de todo riesgo. Habrá que tomárse esta reflexión y seguir las nuevas reglas del cinéfilo para apoyar a esta industria.
* SensaCine y BoxOffice Pro iniciaron una campaña internacional para mantener el espíritu y amor por las películas en las salas de cine. Amamos la experiencia cinematográfica como los más de 12 mil cinéfilos de todo el mundo que ya se inscribieron. Si quieres unirte aquí puedes conocer más de este movimiento y comparte tus experiencias con el hashtag #JuntosPorElCine. Además, te avisaremos cuando tu cine más cercano abra sus puertas.
