Hablar de la actual situación que tanto atañe al mundo sigue siendo un tema delicado, pero esto no es impedimento para comenzar a pensar en los protocolos que deberían crearse para el eventual regreso de las personas a su vida diaria y, por supuesto, el de muchos cinéfilos en México y el mundo.
Por esta razón recientemente se llevó a cabo una charla dentro del "Foro Uniendo a Latam" organizado por Comscore, en el cual expertos abordaron el tema del regreso del público a las salas de cine y las medidas de higiene que deberán tomarse para disminuir el riesgo de contagio. Esto con el fin de reactivar la industria cinematográfica.
Y para ello Rodrigo Cerón, director de mercadotecnia de Comscore para Latinoamérica, moderó esta reunión digital en la que Paula Aloi, presidente de MUT Emprendimientos, especializada en limpieza e higiene ambiental en empresas, aportó muchas opciones que existen en el mercado y de las cuales los cines del país podrían echar mano para asegurar espacios limpios para sus clientes y de este modo crear un vínculo de confianza:
“Hoy existen cabinas sanitizantes que se ponen en la entrada (de los cines) y tienen cinco pulverizadores de donde sale una sustancia que no perjudica a las personas y sólo le tomará a cada persona dar un giro de 360º y ya podrá entrar y estará sanitizada..."
Dentro de estas cabinas también hay un puesto donde se pueden poner toallas detergentes o alcohol en gel, que también es algo que colabora.
Si este panorama se convirtiera en realidad, tendríamos que acostumbrarnos al hecho de llegar a nuestro cine favorito y hacer una larga fila para iniciar el proceso de desinfección mediante una cabina muy parecida a la de una nave espacial. Pero si esto ya parece un salido de la ciencia ficción, Paula Aloi dejó claro que incluso existente túneles sanitizantes, “los cuales son igual que las cabinas, pero en vez de entrar una persona, entran 20.”
Sin duda las medidas para enfrentar la pandemia actual deben salirse de lo usual, pero esto no quita la extraña sensación que podría formar parte de la nueva experiencia del cine, que a su vez nos transporta a la famosa escena de 2001: Una odisea en el espacio en la que Stanley Kubrick (Ojos bien cerrados) mostró con maestría un largo túnel repleto de luces y construcción geométrica, una idea futurista que bien podría aplicarse para frenar los contagios.
Por ello el enorme mercado de la limpieza en espacios públicos se ha dado a la tarea de seguir innovando. Otro artefacto que Aloi mencionó y podría adaptarse a cines o centros comerciales sería una “alfombra sanitizante, donde las personas la pisan y ya salen con los zapatos desinfectados. En el caso que alguien tuviera el virus en sus suelas, ya deja de llevarlo por todos lados.”
Dentro de las recomendaciones que Aloi compartió van relacionadas al uso adecuado de Lavandina pulverizada como medida de higiene de salas de cine entre funciones; esta sustancia que es en pocas palabras cloro diluido en un porcentaje que no daña ni los objetos en los que se ve en contacto como potenciales irritaciones en la piel y otras partes del cuerpo en las personas asistentes a los complejos cinematográficos. Esta opción está por encima del uso de alcohol etílico, el cual significa un riesgo al ser altamente inflamable.
Para conocer el punto de vista de un experto en medicina, el Dr. José Arturo Alemán Anaya, especialista en epidemiología, egresado de la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud, explicó que para tomar una medida de salud se requiere conocer y analizar paso a paso cómo está constituida la industrial del cine en nuestro país y no esperar a que otras naciones hagan esta tarea y nos digan qué hacer.
“No tenemos que esperar a los italianos, americanos o canadienses para que nos digan qué tenemos que hacer. Nosotros podemos integrar nuestros propios protocolos, ¿qué hay que hacer? Crearlos. La mascarilla quirúrgica que todo mundo está utilizando reduce el espectro de la saliva, esto es una de las muchas que hay que hace en salud pública..."
Debemos mantener la sana distancia; tener el cubrebocas y una distancia de al menos un metro de separación entre personas.
Sin embargo, estas son las medidas generales sólo para entrar en el tema, ya que de acuerdo con el Dr. Alemán Anaya, es imposible crear una única estrategia para aplicarse en todos los cines del país; para ello se debe conocer el comportamiento de cada región, la edad de los asistentes e incluso la afluencia del público, después podrá generarse una medida a doc:
“Para construir un protocolo necesito conocer a los expertos del cine desde el punto de vista de infraestructura y mercadotecnia; necesito conocer incluso sus contenidos para poder crear con puntual detalle de cómo podremos trabajar en cada cine para poder hacer un protocolo de seguridad que garantice a los usuarios disfrutar una película sin poner en riesgo su salud.”
De este modo nos queda claro que el futuro del cine deberá traer consigo una serie de notables cambios que aseguren la salud de los cinéfilos asistentes a salas de todo el país, pero los protocolos tendrán que elaborarse con distintas especificaciones de acuerdo a la ubicación del complejo o al tipo de público. Sin duda un tema complejo que comenzará a tomar forma con el paso de las semanas debido a la tentativa cercanía que se espera para reabrir salas de cine.