Hasta la actualidad Matilda es recordada con mucho aprecio y ternura gracias al estupendo trabajo de la entonces pequeña actriz: Mara Wilson, quien interpretó a una niña brillante con poderes mágicos que sufría por sus padres disfuncionales y la directora de la escuela donde iba, hasta que conoció a una dulce maestra que la entendía. Un clásico noventero que prácticamente significó la cúspide de una carrera actoral prometedora, pero que fue decayendo rápidamente hasta alejar a Mara de los reflectores.
Pero antes de Matilda, Wilson ya era una niña bien conocida en la industria del séptimo arte, gracias a participaciones en películas como: Papá por siempre (que representó su debut en pantalla grande), el remake de Milagro en la Calle 34 y hasta su participación en la serie: Melrose Place. No obstante, llegó la inevitable época del crecimiento, lo que para muchos significa un repelente de papeles en Hollywood, situación que aplicó para Mara.
Su última participación en una película fue en Thomas and the Magic Railroad (2000) cuando tenía 13 años y, tras esto, decidió alejarse de la actuación. Años antes, en el marco del estreno de Matilda, su madre murió debido al cáncer, lo que también la marcó personalmente y, aunque continuó con su trayectoria algunos años más, se había vuelto una actividad que ya no disfrutaba:
“Recuerdo que en la universidad dormiría durante mis clases de actuación, me autosabotearía, porque tenía mucho miedo de dejar que la gente me viera como actriz,” mencionó Mara en una entrevista para wbur: “Estaba en NYU y sabía que había muchos buenos actores allí, y lo que pasa con las clases de actuación es que estás interpretando papeles que normalmente no interpretas. Estaba aterrorizada; congelada de miedo.”
Y continuó: “Fue entonces cuando comencé a centrarme más en la escritura. Incluso en los sets de varias películas, siempre estaba en mi tráiler escribiendo historias, generalmente muy similar a cualquier libro de Judy Blume, Beverly Cleary o Bruce Coville que estaba leyendo en ese momento, pero me encantaba escribir.”
Hasta la actualidad, Wilson se ha enfocado a desarrollar su carrera como escritora, incluso en 2016 publicó el libro: Where Am I Now? True Stories of Girlhood and Accidental Fame, un relato autobiográfico en el que menciona lo complicado de crecer ante la mirada del mundo por la fama que estaba ligada a su nombre.
A pesar de lo anterior, Mara Wilson no se alejó por completo del mundo del cine y la televisión, ya que desde 2012 ha desarrollado una carrera como actriz que presta voz a diversos personajes, entre los que destacan Jill Pill en BoJack Horseman y Liv Amara en Big Hero 6: La serie, pero como tal salir frente a cámara ya no es algo que la caracterice y disfruta mucho de la vida que lleva en la actualidad:
Me siento bien conmigo misma y siento que tengo el control de mi propia historia y narrativa. Lo cual es un sentimiento muy bueno, porque no creo haberlo tenido cuando era niña. Sentía que alguien más siempre contaba mi historia o inventaba historias sobre mí.
A pesar de su cambio de prioridades en la vida, la seguiremos recordando con cariño por su paso en el cine cuando era una pequeña.