Esta semana la tercera temporada de Élite finalmente llegará al catálogo de Netflix, específicamente el viernes 13 de marzo y tendremos una nueva dosis de dramas escolares, secretos mortales e inesperadas traiciones, por ello vamos a plantearte uno de los mayores enigmas que fueron planteados desde la primera temporada y sigue sin ser resuelto e incluso muy pocos se acuerdan: ¿Nadia (Mina El Hammani) es portadora de VIH?
Uno de los mayores temas con los que abrió esta serie fue la libertad sexual de un grupo de adolescentes, por ello en cuanto supimos que Marina (María Pedraza) había sido contagiada desde pequeña por un exnovio nuestro panorama dio un giro de 360º. A pesar de tener controlado dicho padecimiento con una enorme dosis de medicamento, el riesgo de contagio sigue latente.
Y uno de los giros emocionales de la primera temporada es cuando vemos a Marina retomar su vida sexual con Nano (Jaime Lorente) sin ninguna protección, razón que nos sorprendió por completo. Todo tiene consecuencias, más tarde se confirma el embarazo de Marina y de una forma inesperada la escuela se entera de la condición de VIH de la carismática pelirroja. Aquí es donde Nadia entra en la jugada.
En repetidas ocasiones sufrimos a la par de Nadia debido a su conservadora familia musulmana; esto le ha traído una serie de choques culturales con la España contemporánea, por supuesto el tema de la sexualidad y enfermedades de transmisión sería uno de los más escandalosos para ella.
Durante el episodio cinco de la primera temporada titulado Todos mienten, pudimos presenciar un dramático cierre al mostrar la sobredosis que sufre Marina con la marihuana que distribuía Omar (Omar Ayuso), quien le dio indicaciones de consumo moderado, pero digamos que Marina no pasaba por el momento más estable en su joven vida, esto le llevó a terminársela de un sólo golpe. Por supuesto terminó en mal estado.
Un segundo antes del desmayo de Marina en los vestidores de chicas, Nadia se corta la palma de la mano al intentar cerrar su casillero, esto le deja una herida escandalosa con todo y una ligera hemorragia. Segundos después ella descubre a Marina sin conciencia en el suelo, su primera reacción es ayudarla y aquí se da el momento crítico: sin pensarlo coloca su herida abierta sobre la sangre de Marina.
Este momento es acompañado de un sonido agudo que remarca el rostro de asombro de Nadia; demasiado tarde se da cuenta que expuso su herida abierta a la sangre de Marina y de acuerdo con los estudios primarios del contagio de VIH, estos incluyen contacto directo de torrentes sanguíneos, hecho que en teoría, contagiaría inevitablemente a Nadia.
A lo largo de la historia de Élite uno de los personajes más interesantes y que ha tenido notable evolución es sin duda Nadia, quien ha tenido que sobreponerse a una cultura distinta, círculos sociales alejados a su realidad y a su cambio físico y mental correspondiente a su edad. Sin duda una etapa difícil, aun así, ella ha logrado enfrentar cada reto y nos ha conquistado con su decidida personalidad.
Si observas con detenimiento este elemento de contagio no ha vuelto a tratarse en la narrativa de la exitosa serie de Netflix; es probable que sus creadores, Darío Madrona y Carlos Montero, están esperando en momento adecuado para liberar esta bomba narrativa, misma que también incluiría a Guzmán (Miguel Bernardeau), quien ha tenido momentos sexuales con Nadia.
¿Te imaginas el golpe psicológico para estos personajes? Por una parte Guzmán sufrió que su hermana menor fuera contagiada a muy temprana edad y de alguna manera haya recibo el mismo padecimiento desde la sangre de Marina. Por otra parte Nadia y su familia enfrentarían uno de los mayores temores culturales y económicos, tal vez tendría que abandonar sus estudios y buscar la forma de solventar el tratamiento. La tercera temporada de Élite que llega este viernes 13 de marzo nos podría traer la respuesta a este enorme dilema.