Por más papeles diferentes que acepte Daniel Radcliffe en su carrera es inevitable que nos venga a la mente su rol de Harry Potter en la saga cinematográfica homónima y que por 10 años protagonizó; pasó de ser un niño en La piedra filosofal a prácticamente un adulto en Las reliquias de la muerte – Parte 2. Obviamente el sueño de muchos fanáticos es ver nuevamente al actor encarnar al famoso mago, específicamente en las precuelas de Animales fantásticos, ya sea con un cameo o un papel con mayor duración, aunque realmente esto al intérprete no le interesa de momento.
Recientemente Radcliffe fue cuestionado sobre si le gustaría regresar al rol que lo lanzó a la fama para la nueva saga que también es parte del Wizarding World y la respuesta fue contundente y clara:
No lo creo. No me gusta decir que no a las cosas, pero no es algo que tenga ganas de hacer. Siento que esas películas han avanzado y lo hacen bien sin nosotros. Me alegro de que siga así.
Y es que a Daniel le gusta su actual estilo de vida, alejado de las grandes producciones y decidiendo poco a poco qué proyectos protagonizar: “Me gusta mi vida ahora. No digo que nunca vaya a regresar a una franquicia, pero me gusta la flexibilidad que tengo ahora en mi carrera. No quiero estar en una situación en la que he firmado por una serie con años de adelanto.”
Definitivamente se nota que a Radcliffe ya no le interesa ser el protagonista de una superproducción, al menos por el momento y prefiere quedarse en proyectos más pequeños e independientes, como el caso de Swiss Army Man. Eso sí, también hay que mencionar que no cerró totalmente la puerta a reinterpretar a Harry Potter en algún momento, ya que sabemos que los arreglos monetarios suelen ser jugosos como para ser despreciados.
De los puntos en contra para que Daniel aparezca en Animales fantásticos es que la historia de las precuelas se desarrolla mucho tiempo antes de las películas de Harry Potter, por lo que verlo con su edad actual sería extraño.
Recordemos que por ahora Animales fantásticos 3 está afinando los últimos detalles para comenzar el rodaje y la historia esta vez saldrá de Europa para ambientarse en Río de Janeiro, Brasil.