Hay momentos que marcan una velada de premiaciones y hay otros que simplemente son un parteaguas en la historia del cine y este último es el caso que mejor describe la sorpresiva, pero bien merecida victoria del cineasta surcoreano, Bong Joon-Ho, quien dejó boquiabierto al mundo entero con su más reciente película, por supuesto hablamos de Parásitos.
Cabe destacar que en los últimos 10 años solamente un director estadounidense ha ganado la categoría a Mejor director: Damien Chazelle, quien obtuvo en 2016 el Oscar por La La Land, sin embargo, el resto son realizadores de una nación diferente y se ordenan de la siguiente forma: Tom Hooper (Gran Bretaña, El discurso del rey), Michael Hazanavicius (Francia, El artista), Ang Lee (Taiwán, La vida de Pi), Alfonso Cuarón (México, Gravedad), Alejandro González Iñárritu (México, en años consecutivos por Birdman y El renacido), Damien Chazelle (Estados Unidos, La La Land), Guillermo del Toro (México, La forma del agua), Alfonso Cuarón (México, Roma) y ahora Bong Joon-Ho (Corea del sur, Parásitos)
Y por si fuera poco haber ganado previamente y en la misma noche las doradas estatuillas por Mejor guion original y Mejor película internacional, Joon-Ho se mostró sorprendido (igual que todos lo estuvimos), pero jamás despegó los pies de la tierra y se mostró agradecido por los directores que le inspiraron a llegar hasta este momento:
“Después de ganar Mejor película internacional pensé que ya había terminado y estaba listo para relajarme. Cuando era joven estudiaba cine y decían que si llegabas a lo más profundo del corazón allí sería más personal y más creativo…”
Cuando estaba en la escuela estudiaba las películas de Martin Scorsese, sólo estar nominado junto a él es un honor, jamás pensé que ganaría.
Pero no siempre fue un director reconocido, las personas tampoco hacían largas filas afuera de los cines al rededor del mundo para ver sus películas, como es el caso de Parasite, es por ello que reconoció el amable gesto que Quentin Tarantino siempre tuvo hacia su trabajo, detalle que apareció como un cálido agradecimiento, sin olvidarse de Todd Phillips y Sam Mendes.
"Cuando la gente en EE.UU. no estaban familiarizados con mis películas, Quentin siempre ponía mis películas en sus listas y aquí está él, muchas gracias. Todd, Sam, grandes directores que admiro mucho; si la Academia me lo permite me gustaría partir el Oscar en cinco pedazos y compartirlo con todos ustedes. Gracias, creo que beberé hasta mañana.”
De este modo el cineasta surcoreano, Bong Joon-Ho se ha robado por completo la 92 entrega de los Premios Oscar; es verdad que muchos querían fuera reconocido de esta manera, pero en verdad nadie lo esperaba fuera a convertirse en realidad. De este modo pudimos atestiguar un cambio simbólico de estafeta entre el maestro Scorsese, el conocimiento cinematográfico internacional de Tarantino hacia el nuevo mundo: Bong Joon-Ho, quien por cierto, le ha dado el primer Oscar a Corea del Sur.