Desde la temporada pasada nos dejaron saber que las mujeres no juegan un papel secundario y son escoltas de los diableros, sino que también pueden utilizar (y de mejor manera) los hechizos para defenderse. Para la nueva entrega Keta se vuelve un personaje más fuerte y comienza a explorar con mayor ímpetu su potencial, ayudada de Lupe Reina (Ela Velden), uno de los nuevos personajes que la echa una manita para explorar sus poderes, la enseña a romper las barreras y de paso demuestra también tener fuerza en su rama.
La historia también explora el pasado de Elvis y su relación con uno de sus amigos: Tepoz (Michel Duval), mientras que el mencionado diablero continúa en su búsqueda por pertenecer y ser necesitado. Hay cosas interesantes que van de la mano con estos dos personajes, sin embargo, también hay situaciones muy inverosímiles y complacientes con el guion para resolver ciertos puntos específicos.
Y es que de repente se olvidan de las razones y sólo pasamos a los hechos, dejando algunas preguntas mientras tanto. Es normal que haya ciertas lagunas en la historia, pero se agradece que se mantengan al margen y en la segunda temporada de Diablero sí hay algunos aspectos que debes pasar por alto para seguir disfrutando de la serie, porque sino comienza a perder puntos en la credibilidad.