Este episodio estuvo intenso; por un lado, Amelia teniendo buenas noticias respecto al estado de salud de su bebé y por el otro, la Dra. Miranda Bailey (Chandra Wilson) desafortunadamente pierde al suyo. Ben Warren (Jason George) la apoya, pero el dolor de ella es evidente, ya que anhelaba su segundo hijo y el primero de Ben. Mientras Bailey atendía a un paciente de cáncer que se negaba a recibir quimioterapias se notaba insistente, pero alterada; le explicaba los contras al paciente, los beneficios del tratamiento y de pronto empezó a sangrar e instantáneamente supo la respuesta de lo que le estaba pasando.
La relación de Miranda y Ben se ha tornado complicada desde que él dejó la residencia para convertirse en bombero y el hijo de ambos representaba una estabilidad y quietud que realmente necesitaban. Con toda razón le pide a Warren que la deje sola y lo envía al bar a que se relaje, mientras se tranquiliza. Lo que no sabe es que un evento más desafortunado ocurrirá en el bar y Ben está involucrado: un coche se estampó en el lugar.