Debido al exitoso paso en taquilla de Maléfica en 2014, recaudando más de US$750 millones a nivel mundial, Disney se puso a trabajar en la secuela y cinco años después ya podemos disfrutarla en pantalla grande, de hecho, mucho tiempo antes de lo previsto, ya que originalmente el filme dirigido por Joachim Rønning (Piratas del Caribe: La venganza de Salazar) iba a llegar a cartelera el 29 de mayo del 2020, por lo que intercambió la fecha de estreno con Artemis Fowl.
Cuando vayas al cine a disfrutar de las actuaciones de Angelina Jolie, Elle Fanning y compañía, probablemente te preguntes si vale la pena quedarse hasta después de los créditos por si hay algún material extra que revele más información, sin embargo, te comentamos que NO HAY ESCENA POST-CRÉDITOS, por lo que puedes salir de la sala, si así lo prefieres, con la certeza de no perderte de algún guiño de pilón o pauta hacia la potencial tercera entrega.
De momento no se reporta que Disney esté planeando seguir produciendo películas centradas en la villana original de La bella durmiente, por lo que dependerá de sus ingresos en taquilla si el proyecto se extiende hasta una trilogía o lo mantienen como en la actualidad. Esto ocurrió con su antecesora, de la que no se pensaba seguir la historia, pero dado su éxito exploraron la idea de crear una continuación.
La historia de Maléfica: dueña del mal gira en torno a Aurora y su compromiso con el Príncipe Felipe (Harris Dickinson), aunque las cosas se complican cuando su madrina (Angelina Jolie) y ella conocen a los padres del apuesto joven: el Rey John (Robert Lindsay) y la Reina Ingrith (Michelle Pfeiffer), con quienes no congratula Maléfica y el caos se desata, formando una grieta con su ahijada.
Algo a destacar de la secuela es que las prendas de los personajes lucen increíbles. Entrevistamos a la diseñadora de vestuario, Ellen Mirojnick quien nos confesó el reto que representó sumarse a este proyecto y trabajar muy de cerca con Angelina Jolie: “Si solo hubiera sido la protagonista de la historia sería más fácil porque ella se adecuaría a mis diseños. Pero también era la productora y estaba involucrada en todos los detalles. Cada diseño era aprobado por ella. Mentiría si les dijera que fue fácil complacerla o convencerla. Aprendí como nunca en mi vida. Es una mujer que convierte en magia a los detalles más insignificantes.”