Pocas veces un extraterrestre nos había sacado tantas risas a pesar de que sus habilidades de comunicación, más que limitadas, no son entendibles. Sólo la encantadora Lilo es capaz conectar con él, logrando una de las amistades más representativas de la animación. Stich pertenece a una comunidad extraterrestre donde formaba parte de una serie de experimentos. Al huir en una nave se dirige - sin saberlo - al planeta Tierra y llega específicamente a Hawái para encontrar lo que menos tenía pensado: una familia.
Algunos pueden volar, otros tienen exceso de pelo y bañarse puede ser perjudicial.