El ‘cinematógrafo’, como se le llamaba al cine en México a principios del siglo XX, había llegado a nuestro país en 1896, apenas un año después de que lo inventaran los hermanos Lumiere. Auguste y Louis Jean pensaban que su invento no tenía futuro como negocio (¡imagínense!) y por eso acudían a donde fuera a mostrar su invento con tal de que les pagaran. Así fue como llegaron a México, gracias a una cordial invitación del General Porfirio Díaz, quien de hecho protagonizó la primera filmación que se realizó en nuestro país, titulada: El General Porfirio Díaz pasea a caballo por Chapultepec.
México y el cine comenzaron su romance inmediatamente después de la primera demostración en el sótano de la Droguería Plateros el 14 de agosto de 1896 y poco después serviría para que la Revolución Mexicana fuera el primer conflicto armado en ser filmado. Para finales de los años 20 el país ya se había estabilizado lo suficiente como para que se empezara a conformar una industria fílmica y la política vio en ella un excelente medio para propagar las nuevas ideas que había traído la revolución.
Así, a principios de la década de los 30 comienza el periodo que todos conocemos como la Época de Oro, que utilizó a la Independencia como una de sus primeras temáticas. El director Miguel Contreras Torres fue el encargado de contar esta historia por primera vez en la pantalla grande en 1934 con la película ¡Viva México!, fue protagonizada por Paco Martínez, Sara García, Alberto Martí y Joaquín Busquets. Esta película tuvo tanta aceptación que se convertiría en la primera parte de una trilogía. Le seguiría El padre Morelos y El rayo del sur, ambas realizadas en 1943.
¡Viva México! fue estrenada el 15 de septiembre de 1934 y narra el origen de la lucha de Independencia, desde la conspiración de Querétaro hasta la aprehensión y fusilamiento del cura Hidalgo. La película sigue los valores fincados por José Vasconcelos en los años 20 que intentaban recontar la historia de México y crear héroes a fin de crear identidad. Así que en ¡Viva México! la gesta de Independencia se retrata como una lucha social que triunfó gracias al apoyo de los menos favorecidos. Hoy la calificaríamos de ‘patriotera’, porque se nota a leguas su intento por enardecer el nacionalismo. Impresionantemente la película tiene un excelente sonido, muy buena fotografía y actuaciones muy convincentes. Si eren cinéfilos clavados y se les antoja verla, chequen la programación de hoy de Canal 11 o Canal 22, en una de esas tienen suerte. Si no, aquí les dejamos una probadita...